INVIERNO

Las situaciones que caracterizan la estación invernal vienen dadas en gran medida, en sus grandes rasgos, por la circulación general atmosférica.

Las zonas templadas del globo se encuentran sometidas a una corriente del oeste más o menos constante; este es el hecho fundamental. Esta corriente es perfectamente detectable y mucho más estable en los altos niveles de la tropopausa, mientras que en superficie sufre muchas más variaciones debido a factores geográficos que la perturban. Es sabido que todas las bandas que componen la circulación general sufren un balanceo estacional en sentido meridiano.

Durante el invierno, en el hemisferio Norte, "les vents d'Ouest s'étalent largement. Ce trait découle de la puissance et d la regularité du jet pendant l'hiver" (10) De ahí que estemos sometidos a la influencia de las masas de aire que provienen del atlántico, formadas de aire polar marítimo, templado y húmedo. El jet se instala en latitudes bajas, sobre los 35° Norte, en nuestro hemisferio.

Las pulsaciones de las masas subtropicales por el impulso del anticiclón de las Azores alcanzan nuestra zona en pocas ocasiones. Muchas de esas pulsaciones, como afirma Pédelaborde (11) se realizan con aporte de aire polar de retorno, que se amontona en la apófisis este atlántica del anticiclón de las Azores por las descargas de fin de familia a continuación de una cadena de perturbaciones.

La depresión del Golfo de Génova o depresión ligur afecta de forma importante en esta estación. Formada por un doble efecto térmico -mar más cálido que el continente y dinámico -por efecto de las coladas frías del aire polar, que bajan del norte-, está en la base de las situaciones muy frías sobre La Llanada.

El anticiclón térmico invernal, escandinavo o de Europa oriental, de escaso espesor , tiene también cierta importancia; no tanto por su efecto directo, pues son muy pocas las situaciones en que nos invade, sino por ser el causante de la desviación hacia el norte o hacia el Mediterráneo de las depresiones atlánticas, que enviarán al País Vasco vientos del sur, o cruzarán muy cerca de él, respectivamente.

El anticiclón noratlántico, resultante de fuertes descargas polares, actúa como barrera dé las depresiones atlánticas, instalándose una circulación meridiana muy en relación con las depresiones termodinámicas del Mediterráneo, provocando entre ambos sistemas situaciones del norte que se repiten con cierta frecuencia.

De estas condiciones generales y de los factores inherentes a la situación de la comarca que rodea a Vitoria derivan los tipos de tiempo que pueden anotarse.

Previamente conviene señalar que las estaciones invernal y estival son las que presentan unos caracteres mejor definidos, lo que se pone de manifiesto al comprobar la menor variedad de tipos de tiempo que se da en comparación con las estaciones intermedias, en las que se mezclarán situaciones mucho más dispares. Son 18 en total los tipos que aparecen, de los cuales 7 son anticiclónicos, 6 ciclónicos y 5 interciclónicos.

Los días más numerosos son los de alta presión, aunque no a mucha distancia de los ciclónicos, 46,5 por 100 y 43,2 por 100 respectivamente. El resto, 10,3 por 100, son días interciclónicos. Es, sin embargo, interesante destacar la mayor frecuencia de los días de alta presión en los meses de enero y diciembre, fruto del mayor enfriamiento del continente, mientras que en febrero los días borrascosos superan -16 contra loa los días anticiclónicos.

A pesar de esta mayor abundancia de días anticiclónicos en conjunto, los tipos de tiempo que más aparecen son dos ciclónicos: templado con precipitaciones (Ctp) y f1'Ío con precipitaciones (Cft): 13,7 por 100 y 13,3 por 100 cada uno de ellos.

Los menos frecuentes son los interciclónicos templados (lt) , anticiclónicos cálidos

(Ac) y, en último lugar, los interciclónicos fríos (lf) .

Dentro de los tipos anticiclónicos tienen preferencia por el mes de diciembre, seguido de cerca por febrero, los muy fríos con precipitaciones. Los secos muy fríos aparecen con más intensidad en el primer mes de invierno. Por el contrario, los fríos con precipitaciones o sin ellas, aumentan en enero. Los templados, con y sin precipitación, también crecen en este mes, seguido de cerca por diciembre. Los cálidos sin precipitaciones se dan asimismo con más insistencia -poca, por otra parte en el mes más frío (enero).

Los tiempos ciclónicos se acrecientan en febrero, si hacemos excepción de los muy fríos.

Las precipitaciones, abundantes en esta época del año, se reparten en un 68,6 por 100 de días con precipitación. La repartición es bastante equilibrada, aunque se note un aumento en el mes de diciembre.

Cuadro nº 1. Invierno

Porcentaje de días anticiclónicos: 46,5%

 « « « ciclónicos:43,2%

« « « interciclónicos: 10,3%

 

Tipos de tiempo registrados en invierno y su frecuencia:

 

 

% del total de días

% total de diías anticiclónicos

Amfp

7

15

Amf

6

12,7

Afp

11,8

25,4

Af

4,8

10,3

Atp

6,6

14,3

At

8,4

18,3

Ac

1,9

4

 

 

% del total de días

% total de días ciclónicos

Cmfp

8,1

18,8

Cmf

1,1

2,6

Cfp

13,3

30,7

Cf

3,3

7,7

Ctp

13,7

31,6

Ct

3,7

8,5

 

 

% del total de días

Imfp

2,6

Ifp

2,9

If

0,4

Itp

2,6

It

1,8

1 ANTICICLONICO MUY FRIO CON PRECIPITACIONES.

Este tipo de tiempo se presenta con una cierta frecuencia en esta estación. Supone n 7 por 100 del total de los tipos de tiempo invernal es y un 15 por 100 si sólo contamos )S anticiclónicos. Por su frecuencia, se coloca detrás y muy próximo de los ciclónicos muy fríos y con precipitaciones, con los que tiene una gran semejanza de génesis, desarrollo y consecuencias.

La mayor asiduidad se da en el mes de diciembre, mientras que en enero aparece n escasas ocasiones; éstas son algo más repetidas en febrero.

Las ocasiones en que hace acto de presencia tienen una similitud muy notable entre sí. Se pueden resumir en dos situaciones principales que, lógicamente, presentan diferencias y matices distintos, pues es bien sabido que no hay dos situaciones exactamente iguales. La primera situación, más importante por su mayor frecuencia estadística, se puede caracterizar por la presencia de una baja barométrica en el Mediterráneo se sitúa en los golfos de León o Génova, en éste con más asiduidad, o bien en el mar Tirreno, y un anticiclón de bloqueo en el Atlántico septentrional, al este de las Islas Británicas o sobre ellas, con la característica importante del alargamiento N-S de su eje. entre los dos centros de acción impulsan hacia el S -o SW masas de aire frío, de rigen polar, que llegan hasta las costas africanas. Estas masas de aire van empujando otras situadas en latitudes más meridionales y más cálidas, formándose un frente frío que puede llegar a barrer nuestras latitudes, con las consiguientes precipitaciones a su aso; frente que no es muy activo en nuestra comarca debido a que la presión es elevada. Tras el frente, las precipitaciones pueden continuar, aunque de forma muy débil, fruto del flujo de componente norte y los consiguientes fenómenos de estancamiento.

En otras ocasiones no existe tal frente, o éste ha discurrido más al este de La Llanada, y las precipitaciones se deben al mencionado flujo del norte y pueden alcanzar, a veces, cotas más que moderadas.

En algunos casos las precipitaciones pueden ser elevadas, pero entonces se producen siempre con la progresión de la discontinuidad frontal, tal como ocurrió el día 3 de febrero de 1968, en el que se recogieron 21,3 litros. Por otro lado, es de destacar que en más de la mitad de los días sometidos a esta situación, las precipitaciones son en forma de nieve.

La otra situación que da paso a este tipo de tiempo es más puramente anticiclónica. El anticiclón atlántico, sobre las Azores, se une por un puente de altas presiones con el europeo, quedando nuestra comarca inmersa en una zona de gradiente barométrico muy débil, lo que unido a la fuerte irradiación favorece la formación de nieblas. Estas serán las causantes de que la temperatura diurna no aumente y de las precipitaciones, décimas de litro, que se desprenden. Así ocurre los días 17 y 18 de diciembre de 1970, en los que la niebla no se disipa en ningún momento. Es en este último mes del año cuando se da con una frecuencia casi exclusiva esta última situación.

Este tipo, en su primera variedad, suele provenir de otros anticiclónicos como él, especialmente del anticiclónico frío y con precipitaciones, mientras el anticiclón atlántico se va alargando y adoptando la posición descrita. También puede ir precedido, aunque en una proporción menor que la anterior (la mitad aproximadamente) , de tipos de tiempo emparentados con él, como son los interciclónicos o ciclónicos muy fríos y con precipitaciones. Su duración es corta: uno o dos días. Casi en las dos terceras partes de las veces en que se presenta dura un sólo día, mientras que en las demás permanece durante dos.

El día 26-1170 (ver gráfico 1) nos ejemplifica una de estas situaciones. Los frentes asociados a las borrascas atlánticas ven cerrado su paso hacia las costas de Europa por una alta de 1.036 mb. , centrada al W. de Galicia y alargando un apéndice hacia latitudes más septentrionales. Un centro de bajas presiones bastante alejado de nosotros ocupa el sur de la península italiana. Entre ambos fluye una corriente del Norte arrastrando masas de aire frío que son las causantes de las bajas temperaturas de ese día. A pesar de que no hay paso de frente alguno, la precipitación recogida es importante. Las características de ese día son las siguientes:

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

3,2

0,6

18,3

 

Mapa 1

La situación del mapa sinóptico de 500 mb. no hace sino reforzar el de superficie. Un alta de bloqueo en el Atlántico y una baja centrada sobre los Alpes. Las temperaturas a este nivel son muy bajas sobre la vertical de La Llanada, como puede observarse en el mapa adjunto, lo que refuerza la inestabilidad y explica en gran parte la abundante precipitación, que se da en forma sólida (granizo y nieve) y cubre el suelo.

 

2. ANTICICLONICO MUY FRIO SIN PRECIPITACIONES,

Muy similares a los anteriores tanto en su estructura como en su frecuencia. Un 6 por 100 de los tipos de tiempo invernales pertenecen a esta categoría, mientras que dentro de los anticiclónicos ocupan un 12,7 por 100 de las ocasiones. Al igual que los anteriores, también es en el último mes del año y en el primero del invierno cuando se presentan con mayor asiduidad: tres días por término medio, mientras que en enero y febrero juntos tienen un promedio ligeramente inferior y se reparten equitativamente entre los dos meses.

Las situaciones que los provocan son, como ya hemos adelantado, muy parecidas a las del tipo anterior. También se pueden distinguir dos situaciones que los resumen a todos y que son casi una réplica de las del apartado anterior. La primera, y también más frecuente, se presenta con un anticiclón de bloqueo en el Atlántico occidental y una baja presión en el Mediterráneo. La diferencia que presentan es que el giro anticiclónico está más marcado sobre nuestras comarcas y, por lo tanto, los vientos provienen del continente europeo, del nordeste, muy fríos y secos. La humedad de estas masas de aire es, pues, menor debido a su procedencia continental. Por ello no desprenden precipitaciones. De todas formas, no suponen un tiempo despejado en este primer caso,

Mapa 2

sino que, por el contrario, la nubosidad es abundante: gran parte de los días en esta situación son días cubiertos con nubosidad estratificada que en alguna ocasión deja caer una precipitación casi inapreciable.

La segunda modalidad sería la que hemos descrito en el anterior apartado. Es decir, una extensa área anticiclónica que desde latitudes subtropicales en el Atlántico se extiende hasta el interior del continente europeo, con gradientes de presión muy débiles sobre éste, situación propicia a las nieblas que casi indefectiblemente acompañan a estas situaciones. La única diferencia que existe entre esta clase de situaciones y las que hemos visto en el caso del tipo anticiclónico muy frío y con precipitaciones, en su segunda variedad, es, precisamente, el hecho de que en aquélla niebla desprende precipitaciones, mientras que ahora no ocurre lo mismo debido a una consideración en partículas más pequeñas.

Proviene de las situaciones anteriores (Amfp) en más del 60 por 100 de los casos, mientras que en las demás ocasiones se lo reparten por igual los tipos ciclónicos e interciclónicos muy fríos y con precipitaciones y los anticiclónicos templados con precipitaciones. Los tipos de tiempo que le suceden no pueden ser clasificados, pues no parece existir un norma clara, ya que son muchos los que origina. Sin embargo, tienen preferencia los anticiclónicos sobre los ciclónicos e interciclónicos. Asimismo, derivan hacia tipos fríos y, en menor proporción, a muy fríos.

El día 13-XII-69 se presenta una situación de este tipo, de la segunda variedad a que hemos hecho mención. Una franja de altas se extiende desde el Atlántico central

con dos centros de 1.028 n/b. situados uno al norte del otro sobre los 30°-40° de longitud oeste, enlazando con 1:t5 altas continentales europeas; éstas últimas, que no tienen su confirmación en niveles más altos, nos hacen pensar en su origen térmico a causa del mayor enfriamiento del continente con respecto al mar en esta época del año. Por el contrario, las altas oceánicas vienen reforzadas en altura. Más al norte de esta amplia zona positiva, barométricamente hablando, discurren las borrascas atlánticas y el fluio del Oeste, al norte del paralelo 50? Nuestra comarca se encuentra, pues, inmersa en el dominio de las altas presiones y prácticamente sin gradiente barométrico alguno.

Las temperaturas de ese día fueron muy bajas, con una amplitud térmica pequeña debido a la persistencia de la niebla que no levantó en todo el día. La humedad relativa se mantuvo constante, en el límite del 100% , mientras que el aire se mostró en calma, sin movimientos horizontales apreciables. La elevada humedad reinante contribuye a que estos días anticiclónicos se encuentren entre los más duros del invierno en La Llanada.

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

0,8

-3,8

4,1

 

La otra variedad, como ya se ha visto, aun dando unas temperaturas también muy bajas ya que la insolación es pequeña por la nubosidad estratificada, es de ambiente más seco y por lo tanto más benigno. Los vientos del nordeste, débiles, aparecen en estos casos.

 

3. ANTICICLONICOS FRIOS CON PRECIPITACIONES.

Son uno de los tipos que con más frecuencia aparecen durante el invierno. Quedan en tercer lugar por orden de frecuencia, detrás de los tipos ciclónicos templados con precipitaciones y fríos con precipitaciones, ocupando un 11 ,8 por 100 de los tipos invernales. Entre los de su misma categoría bárica -anticiclónicos- es el más repetido, con un 25,4 por 100 de las ocasiones.

Se nota una tendencia a aparecer con mayor frecuencia durante el mes central del invierno, seguido a muy corta distancia por el mes de diciembre, con 4 días de promedio, mientras que en aquél eran 4,3. El porcentaje disminuye notablemente en febrero, haciéndose unas cuatro veces menor.

Las situaciones que dan lugar a este tipo de tiempo son más variadas que en los casos anteriores ya vistos, pero se pueden destacar algunas como más representativas. La primera y más importante sería la instalación de un núcleo de altas presiones centrado al w. de la Península Ibérica, abrazando a ésta dentro de su radio de acción. Este anticiclón es atlántico, proveniente del de las Azores como apéndice de aquél. En altura se ve ayudado por la misma situación de alta. Por el borde nororiental, que se dispone en estos casos según una dirección isobárica NW -SW , circulan las perturbaciones atlánticas en camino hacia el Mediterráneo central, por lo menos. En altura,

sobre el Mediterráneo, se dibuja una vaguada que atrae también a estas depresiones. Las consecuencias sobre la comarca que estamos estudiando serán las siguientes: flujo del NW ., paso de un frente frío -en muchas menos ocasiones lo hacen un par de frentes, cálido y frío-, temperaturas inferiores a los 10°C y precipitaciones moderadas o en algún caso fuertes.

Dentro de este esquema general se puede notar alguna diferencia que consiste esencialmente en la posición del centro de altas y, por consiguiente, del flujo sobre nuestra zona. En el caso de que el centro positivo se sitúe más al sur que en la ocasión anterior, los vientos tendrán una dirección más marcadamente zonal, revelando en consecuencia su origen más templado por provenir de una latitud más meridional que la correspondiente al flujo del NW .Este tipo de tiempo, anticiclónico frío y con precipitaciones, se da casi exclusivamente, con esta dirección del flujo -del W y en algún caso aislado del SW-, en el mes más frío del año, enero, ya que durante los otros dos meses del invierno, si persiste este flujo zonal, existirá la tendencia a que pasen a ser tipos de tiempo con temperaturas más elevadas, por lo que entran a formar parte de otros tipos, templados por lo general, según la nomenclatura que hemos adoptado. En estos dos meses predomina el flujo del NW con estas situaciones.

Tras el paso del frente, los vientos tienden a soplar de dirección más septentrional, con lo que las temperaturas se mantienen bajas e incluso descienden algo más; mientras que las precipitaciones continúan, si bien de manera más suave y esporádica. Ello ocurre en el segundo día de esta situación -si es que dura dos- que, como veremos más adelante, se produce en el 50 por 100 de estos casos.

Una tercera variedad de situación atmosférica que tiene como resultado el tipo de tiempo que vemos, es la siguiente: una amplia zona anticiclónica que va desde el Atlántico central hasta el interior del continente europeo, enfriado ya fuertemente por lo avanzado de la estación. La situación es muy similar a la que examinábamos en los dos aparatos anteriores como una de las variedades de aquellos tipos de tiempo. En este caso, la originalidad que diferencia esta situación es el paso sobre nuestras latitudes de un frente de chubascos que, desde lugares septentrionales (Escandinavia o sus alrededores) por donde circulan las perturbaciones del oeste, se alarga a través del continente adentrándose totalmente en áreas de altas presiones y alcanzando nuestra región. Las precipitaciones, en este caso, son muy inferiores a las de las situaciones anteriores debido a la poca inestabilidad que existe. Las situaciones, o, mejor aún, los tipos de tiempo que preceden a éste, se pueden reducir a dos por ser las que con más frecuencia le anteceden. Las dos se reparten la precedencia a panes iguales. La primera sería de tipo anticiclónico templado y con precipitaciones, -y la podríamos caracterizar diciendo que se trata del paso de borrascas atlánticas por latitudes algo más bajas, de forma que sus frentes, de procedencia oceánica y llegando del W o SW, barren, no muy activos, nuestra comarca, dejando tras su paso vientos del NW , algo más frescos, ayudados por la prolongación hacia el norte del anticiclón causante de estos flujos del NW .Este tipo de tiempo (Afp) surge así en más de un 35 por 100 de los casos.

El segundo tipo que le antecede -iguala en frecuencia al anterior- es el anticiclónico muy frío y con precipitaciones. En efecto, tras la implantación de una situación del norte o nordeste desde latitudes muy elevadas, el anticiclón de bloqueo del Atlántico Norte tiende a achatarse y dejar que las corrientes perturbadas puedan circular por paralelos más meridionales, girando 'el flujo para tomar una componente más zonal. Dicho con otras palabras, sería el paso de una situación en Q (omega) a un situación en«W» (doble uve).

 

Mapa 3

Los tipos que suceden al que estamos observando son preferentemente anticíclónicos, teniendo especial inclinación hacia los anticiclónicos muy fríos con precipitaciones. Mientras el anticiclón atlántico se dirige hacia el norte bloqueando el paso de la corriente zonal, se producen las características que hemos citado como perteneciente al tipo Afp. Por lo que vemos, pues, tanto antes como después estos dos tipos presentan una continuidad bastante destacable. También puede dar lugar, y con una insistencia similar o incluso algo mayor, a tipos anticiclónicos templados con precipitaciones (Atp) y ciclónicos fríos con precipitaciones (Cfp), dependiendo de los basculamientos que efectúe el anticiclón situado al oeste (ver gráfico 3).

La duración de este tipo de tiempo es de uno o dos días, repartiéndose por partes iguales la frecuencia de cada orden. Cuando se manifiesta durante dos días ya hemos visto cómo es el proceso. El día 3 de enero de 1968 aparece en altura una vaguada sobre el Mediterráneo que puede verse perfectamente en el mapa sinóptico de los 00 h. : sobre el Atlántico, una potente dorsal anticiclónica. En superficie las cosas siguen el mismo

camino: desde las costas americanas, una familia de borrascas bordea el anticiclón, potente (1032 mb.), para enfilar luego una dirección SE, pasando por las Islas Británicas y siguiendo su camino hacia la península italiana. Las discontinuidades a ellas asociadas barren toda Europa occidental, penetrando desde el NW .En el mapa que presentamos aparecen dos frentes, cálido y frío, siendo este último el más activo en nuestra comarca. 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

9,8

6,2

19,9

 

El cielo permanece prácticamente cubierto todo el día; sólo se registran 0,55 horas de sol, en tanto que la humedad relativa se mantiene superior al 80% .

 

4. ANTICICLONICO FRIO SIN PRECIPITACIONES

Es una derivación de los tipos anticiclónicos muy fríos con o sin precipitaciones. También, sin embargo, suele suceder a tipos siempre anticiclónicos, pero templados o fríos con precipitaciones. Es poco frecuente en invierno ya que se presenta en un 4,8 por 100 de los días. Dentro de los anticiclónicos, ocupa el penúltimo lugar por orden de frecuencia decreciente, con un 10,3 por 100, superando únicamente a los tipos anticiclónicos cálidos sin precipitaciones. Cuando más a menudo aparece es en el mes de enero, y, cuando menos, en febrero.

Las situaciones que lo provocan pueden ser de tres tipos. La más habitual es la que deriva de situaciones muy frías provocadas por corrientes del nordeste, que arrastran masas de aire desde las llanuras eslavas o centroeuropeas. Con el alejamiento de la depresión mediterránea que completa esta situación, ésta se va debilitando. Asimismo, el anticiclón va siendo retraído por el empuje de la corriente zonal que, en este caso, discurría por latitudes medias o altas. La consecuencia es que el anticiclón, que sigue manteniendo la orientación de su eje NE-SW, no alcanza a llegar muy al interior del continente, por lo que la corriente de vientos, aunque se mantiene del nordeste, no proviene de las frías tierras continentales, sino que transporta masas de aire atlánticas que han sido degradadas por un pequeño recorrido sobre Europa central. De ahí que las temperaturas no sean muy bajas y /haya perdido el grado de humedad atlántico.

Una segunda situación vendría dada por la extensión hacia el sur, hacia el Mediterráneo, del anticiclón continental, que se encuentra apaisado y alargado en forma de elipse, según un eje EW ., de tal forma que el flujo que llega a La Llanada proviene del este. Las masas de aire que se ven arrastradas son en su origen frías e incluso muy frías –continentales pero van siendo recalentadas por ese recorrido sobre el mar Mediterráneo, que conserva un grado calórico importante. Se pueden producir precipitaciones en las costas mediterráneas de la Península Ibérica, pero no alcanzan la zona de nuestro estudio.

 

Mapa 4

Un centro de altas al W. puede también producir este tipo de tiempo. Se da sobre todo en el mes de enero, ya que las temperaturas en general son siempre más bajas en este mes. En los otros meses invernales pasarían a ser tipos templados, a causa del origen más cálido de las masas de aire.

Como ya apuntábamos al comienzo del comentario de este tipo 'de tiempo, proviene, en la mitad de los casos, de tipos anticiclónicos muy fríos, con o sin precipitaciones, por degradación de esa situación; los tiempos que le siguen son prácticamente todos anticiclónicos. A lo sumo pueden ser interciclónicos, pero tipos ciclónicos no aparecen detrás de éste. Entre los anticiclónicos, puede derivar a muy fríos con precipitaciones, por un proceso inverso de formación al que hacíamos mención al hablar de su degradación. También pasa a tipos templados, con o sin precipitaciones, cuando por progresivo encogimiento del apéndice continental del anticiclón deja que la corriente zonal llegue a estas latitudes.

La duración o permanencia es de un día en el 70 por 100 de los casos, alargándose en el resto de las ocasiones a dos días. No aparecen períodos más largos, lo que nos indica que es un tipo de tiempo con características de transición.

Si observamos el mapa sinóptico del día 19 de diciembre de 1970 podremos ver cómo el anticiclón continental se encuentra ocupando toda Europa Central y Occidental. La isobara de 1024 mb. parece ceñirse a las costas del continente; su centro aparece sobre los Alpes y se prolonga hacia la Península Balcánica. La corriente zonal oceánica afecta únicamente al norte de Irlanda, Escocia y las costas noruegas, ya que el alta no le deja penetrar hacia el oeste. La posición del individuo isobárico que nos afecta es tal,

que el flujo afecta a nuestra zona procedente del este, con una flexión hacia el SW. ya cerca de la Península Ibérica.

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

6,5

-6,2

-

 

Es de notar que con este tipo de tiempo aparecen las heladas. Mejor dicho, con la variedad que hemos presentado como ejemplo. En efecto, si nuestra zona queda dentro del ámbito de mayor influencia de las altas presiones, es decir, allí donde el gradiente barométrico es prácticamente nulo, y, como consecuencia, el viento casi inexistente, la irradiación nocturna es importante y las temperaturas pueden adquirir valores realmente bajos. Si por el contrario persiste el movimiento del aire, como sucede cuando la depresión mediterránea está más cerca y por la tanto se da un mayor gradiente de presión, la irradiación es mucho menor y los valores de helada difíciles de alcanzar .

Como se puede notar, el ejemplo expuesto puede derivar a muy frío, incluso con precipitaciones si la niebla hace su aparición y actúa con persistencia. Por último, se puede destacar que, en efecto, este tipo de tiempo es también propicio a las nieblas.

5. ANTICICLONICO TEMPLADO CON PRECIPITACIONES.

Se presenta en más ocasiones que el anterior, pero sin ser muy frecuente. También puede ser considerado como un tipo de transición, poco duradero. Representa un 6,6 por 100 sobre los tipos de tiempo que aparecen en invierno y un 14,3 por 100 de los anticiclónicos. Se da con una mayor frecuencia en diciembre y enero, siendo febrero el mes en el que menos se registra.

La forma más típica de aparición de este tipo es la siguiente. Un centro de presión alta se sitúa al W de la Península Ibérica, estando su centro entre ésta y el archipiélago azórico. Toda la Península y gran parte de Francia quedan dentro del radio de acción del anticiclón atlántico, en su fachada norte. Este anticiclón está achatado en esta cara septentrional ya que por ahí circulan las depresiones que cruzan el Atlántico por una zona superior al paralelo 45°N por la menos. La corriente de vientos, templados y húmedos que domina es de componente oeste. De ahí sus características termo-pluviométricas en nuestra comarca. Sin embargo hay que tener presente que, pese a la abundancia de humedad de estas masas de aire que provienen del Atlántico y de unos lugares la suficientemente templados como para adquirir una gran humedad, no resultan especialmente lluviosos sobre esta comarca. Para que se produzca la precipitación es condición casi indispensable el paso de un frente, frío en la mayoría de los casos, que acompañe a las depresiones que circulan por latitudes más elevadas. Si la discontinuidad frontal se mueve desde el W. hacia el E. , las precipitaciones son escasas, inferiores a un litro. Piénsese que participan varios factores para que esto sea así: en primer

 

Mapa 5

lugar, la presión elevada que unida a la débil inestabilidad, salvo en el mismo paso del frente, dificulta las precipitaciones; en segundo término, la disposición geográfica de la Península. La Llanada está muy al abrigo de los vientos del W. , que deben recorrer una trayectoria terrestre bastante larga para alcanzarla desde las costas gallegas.

Una variedad de la situación anterior, pero mucho más eficaz en el aspecto de la abundancia pluviométrica, aparece cuando el anticiclón adopta una forma menos achatada y se abulta hacia el norte. De esta forma, los vientos provienen del noroeste ya que La Llanada se sitúa en la banda nororiental de dicho anticiclón. Es una situación muy similar a la que se daba con algunos tipos de tiempo de carácter más frío. La diferencia térmica viene dada en gran parte por el mayor o menos abombamiento del área anticiclónica y, por tanto, de la mayor o menor estancia o recorrido de las masas de aire por latitudes situadas más al norte.

Un tercer grupo dentro de esta clase de tipo de tiempo, mucho menos numerosos, es aquél en el que un área de altas presiones se sitúa sobre las Islas Británicas o sus inmediaciones, y al sur de la Península se establece una borrasca. Los vientos provenientes del sur con frentes en esta misma dirección, que cruzan la península, darán las características propias de este tipo. En enero aparece con mayor frecuencia esta situación.

Los tipos que anteceden a éste son en su mayor parte anticiclónicos, al igual que él. De éstos, las dos terceras partes son templados y sin precipitaciones, de acuerdo con el movimiento de los frentes que van cruzando el Atlántico. Recordemos que hay precipitación si pasa algún frente; en los intervalos no se produce lluvia. También suele provenir del achatamiento hacia el sur del anticiclón atlántico; de una situación fría y con precipitaciones, por lo tanto.

 

La duración que más caracteriza a este tipo de tiempo es la de un día únicamente; en un 90 por 100 de los casos. Las series más largas, poco frecuentes, no sobrepasan los tres mas seguidos.

El tipo de tiempo que con más frecuencia sucede a éste es el anticiclón frío con precipitaciones (Afp), por abombamiento del alta atlántica. Le sigue en importancia el anticiclónico templado (At), en los periodos de intervalo entre el paso de los frentes o por la desviación de éstos hacia latitudes más altas.

El día 6 de enero del año 68 se dibuja una situación muy representativa de lo que hemos venido diciendo. En altura, en el nivel de 500 mb. , aparece claramente reflejada una corriente de componente w. que discurre por el océano Atlántico hacia Europa. Una alta al sur y una baja al norte delimitan dicho flujo. En superficie se muestra una situación muy parecida. El centro de las altas presiones se coloca al W. de la península, con 1032 mb.; una dorsal derivada de él asciende hacia el norte, al oeste de Irlanda, ocasionando en nuestra comarca un flujo del noroeste que no es sino una desviación de detalle de la componente general del oeste. Un frente frío asociado a la depresión que se centra en los Países Bajos comienza a atravesar la Península. En Vitoria se dan estas medidas:

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

10,6

6

0,4

 

6. ANTICICLONICO TEMPLADO SIN PRECIPITACIONES.

Dentro de los tipos anticiclónicos invernales, éste se presenta con cierta frecuencia ya que supone un 18,3 por 100 de ellos. Ocupa el segundo lugar en la clasificación de frecuencias de los tipos anticiclónicos de invierno, detrás del frío con precipitaciones. Como vemos, el anticiclón atlántico tiene una influencia mucho mayor en los tipos de tiempo invernales que el continental, mucho menos frecuente. Sumados los ciclónicos e interciclónicos a éstos, alcanza un 8,4 por 100 del total.

Es en el mes de enero donde adquieren mayor repetición, con más de cuatro mas de promedio. Febrero, mes eminentemente ciclónico, es el que los cuenta en menor proporción, con menos de dos días.

Las situaciones que lo conforman las podemos considerar variantes de las que hemos visto en el tipo de tiempo anterior, o, bien, éstas de aquéllas. Efectivamente, tienen un parentesco muy cercano y van sucediéndose y precediéndose unas a otras con asiduidad. La situación más corriente se da en aquellos días en que el anticiclón atlántico en latitudes equivalentes a las de la Península, pero más al W, acoge a ésta dentro de sí. La diferencia con los casos anteriores reside en que las perturbaciones oceánicas discurren por latitudes más elevadas, no llegando sus discontinuidades a afectar a la Península. Las masas de aire son, pues, oceánicas, templadas y con una estratificación estable. La ausencia de frentes da como consecuencia que no se produzcan precipitaciones, aunque en muchos casos la nubosidad llegue a ser abundante.

 

Mapa 6

En el mes de enero, aunque no sólo en él, se da otra situación que conlleva unos efectos similares. Un área anticiclónica se centra en el continente europeo, sobre las costas occidentales, y, abarcando el Mediterráneo occidental y ayudado por una depresión centrada al W de la Península Ibérica, mueve masas de aire que proceden del sur. Esta dirección que tienen sobre la Península resulta ser una desviación de una corriente atlántica procedente del oeste. Es decir, la procedencia de la masa de aire es similar que en el caso anterior, pero con distinto trayecto, más meridional. Este tipo de situaciones puede dar, asimismo, tipos de tiempo más templados que el que estamos considerando.

Estos tipos de tiempo y los anteriores que hemos visto son consecuencia del acercamiento o alejamiento del centro positivo del Atlántico y de su mayor o menor curvatura sobre el océano; por ello es lógico pensar, y así ocurre de hecho, que los tipos de tiempo que preceden a éste que estamos viendo sean casi exclusivamente anticiclónicos. Dentro de ellos se reparten por igual los templados y con precipitaciones (Atp) y los cálidos y fríos sin precipitaciones (Ac y Af) .En el primer caso, tras el paso de los frentes que puedan acercarse, que son los causantes de dichas precipitaciones, y el consiguiente aumento de la presión atmosférica; en el segundo, según aumente o disminuya hacia el norte la curvatura del anticiclón

La duración de este tipo de tiempo es escasa; en un 65 por 100 de las ocasiones, aproximadamente, duran un solo día; algo más de un 20 por 100 de ellos se alargan durante un día más, dos en total y esporádicamente pueden darse series más largas, de hasta cinco días.

El tipo de tiempo que sucede a éste como más habitual (más del 60 por 100 de las veces) es precisamente el anticiclónico templado con precipitaciones, de acuerdo con lo que hemos señalado antes. El resto de las ocasiones se lo reparten los anticiclónicos fríos o cálidos y, en una pequeña proporción -alrededor 'de un 5 por 100 los 'muy fríos con precipitaciones, en el caso de un alargamiento notable del anticiclón hacia el norte llegando a bloquear la circulación zonal.

En la situación representada, que corresponde al día 21-11-70, vemos cómo un anticiclón potente (1032 mb.) se encuentra al W de la Península, afectándonos su borde nororiental. Las perturbaciones atlánticas caminan por el norte del paralelo 50°, no llegando sus frentes hasta nuestra comarca.

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

10

2,8

-

 

Temperaturas suaves, ausencia de precipitaciones, nubosidad abundante (7, 8 y 3 octas a las 7, 13 y 18 horas respectivamente); la humedad relativa es elevada y los vientos débiles o en calma.

 

7 ANTICICLONICO CALIDO SIN PRECIPITACIONES.

Es un tipo de tiempo poco frecuente en esta ocasión; únicamente alcanza menos del 2 por 100 del los días, siendo el antepenúltimo tipo por orden de frecuencia, por delante del ciclónico muy frío sin precipitaciones (Cmf) y del interciclónico frío (If), que son menos repetidos. Es, asimismo, el tipo anticiclónico más inusual en invierno, con un 4 por 100 de apariciones.

La situación es sencilla: en altura, una dorsal que cubre toda nuestra zona empujando a la corriente zonal hacia las Islas Británicas; en superficie, un centro de altas presiones se establece sobre la Península Ibérica o muy cerca de ella, permaneciendo dentro del área de subsidencia del anticiclón. Aun siendo zona de calma, podemos observar en ocasiones cierto flujo de componente sur por la existencia de una depresión situada al w. , en el Atlántico, sobre la zona de las Azores.

La consecuencia son días calurosos para la estación, sin precipitaciones, con calma anemométrica y nubosidad más bien escasa; según sea ésta más o menos abundante, la amplitud térmica será menor o mayor. Es difícil, con todo, que se alcancen valores de helada.

El antecedente inmediato de este tipo de tiempo es el anticiclónico templado (At), por traslación hacia el este del núcleo anticlonal, situándose éste sobre la Península. Su duración es de un día y, menos frecuentemente, de dos.

 

Mapa 7

 

Deriva hacia la misma situación de la que procede, es decir, un tiempo anticiclónico templado sin precipitaciones, por un descenso en latitud de la corriente zonal, sin que derive lo suficiente para que nos lleguen los frentes que acarrea.

El día 14-1-68 aparece en altura una dorsal que se estira hacia el nordeste tomando plenamente la Península. En superficie, el centro positivo (1032 mb.) se emplaza sobre la Península. Un frente ocluído va desde las islas Baleares hasta Escandinavia; frente que el día anterior rozó la comisa cantábrica sin más consecuencia en La Llanada que un aumento de la nubosidad, causante de que las temperaturas no se elevasen más, quedando un tipo templado. El día 14 la nubosidad es muy escasa, de tipo cirros, y la insolación de 178% .

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

16,6

1

-

 

Este tipo de tiempo se mantiene el día siguiente, el 15, para pasar al tercer día a ser anticiclónico templado sin precipitaciones, por el acercamiento de una vaguada.

 

8. CICLONICO MUY FRIO CON PRECIPITACIONES.

Es un tipo de tiempo muy notable, no tanto por su frecuencia, sino por las extremadas consecuencias meteorológicas que produce.

Su presencia entre los diferentes tipos invernales es media, un 8,1 por 100 del total, aumentando a un 18,8 por 100 si sólo nos atenemos a los ciclónicos; en éstos ocupa el tercer lugar por el número de apariciones.

las épocas en las que figura más insistentemente son el mes de diciembre, a finales y el mes de febrero, dejando un paréntesis de menor incidencia en el mes central del invierno; asimismo, al principio de la primavera se repite con más frecuencia que en este último mes.

Sus temperaturas notablemente bajas, especialmente las máximas, vienen causadas por su pertenencia a masas de aire muy frío, de procedencia polar continental e incluso ártica. Para su llegada a nuestra zona de estudio se precisa un mecanismo que ya hemos conocido al ver los tipos anticiclónicos muy fríos y con precipitaciones y que aquí se repite de una forma muy similar. Un anticiclón de bloqueo situado en latitudes altas, sobre Escandinavia o entre ésta y las Islas Británicas, envía una corriente del noreste o del norte que es absorbida por una depresión situada en el Mediterráneo occidental; depresión que en estos casos se muestra muy activa. Quizás sea más expresivo aún el mapa de altos niveles. En él aparece indefectiblemente una vaguada muy marcada que desde latitudes polares se adentra en el Mediterráneo occidental. Acompañándola, viene una expulsión de aire muy frío que provoca embolsamientos de muy bajas temperaturas sobre este mar. Temperaturas de menos de -30°C son frecuentes en estos casos al nivel de 500 mb. los movimientos de descenso de estas masas provocan una marcada inestabilidad.

la borrasca de superficie se sitúa en aquellos lugares donde las temperaturas son más bajas, circunstancia que puede variar pero que no se aparta nunca de la zona antes citada: el Mediterráneo occidental.

El anticiclón superficial de bloqueo viene también reforzado por otro en los niveles altos. la circulación zonal queda cortada, estableciéndose otra de carácter meridiano o submeridiano, con tendencia a ser del nordeste en este último caso. Un frente de carácter frío precede a esta invasión fría de los altos y bajos niveles, que produce en la comarca alavesa precipitaciones casi siempre en forma de nieve. Estas precipitaciones pueden llegar a ser muy intensas cuando el frente proviene directamente del norte, ya que tiene oportunidad de acaparar más humedad que en el caso de una trayectoria más continental. Así, el día 15-11-70, con frentes de este tipo, se recogen 30 I. de precipitación. Si la situación se mantiene más de un día, que es lo normal, nuevos frentes siguen llegando; frentes que separan masas de aire cada vez más gélidas.

la precipitación puede comenzar siendo líquida al comienzo de esta situación, para pasar a ser de nieve o granizo. Si exceptuamos los casos de discontinuidades que atacan de frente la costa cantábrica, las precipitaciones que se obtienen en los demás casos son generalmente débiles por la escasa capacidad higrométrica de las masas de aire frías.

 

Mapa 8

El tipo de tiempo que le antecede es, en más de la mitad de los casos, el ciclónico frío con precipitaciones, según se va situando el anticiclón en posición de bloqueo.

La duración es de más de un día, aunque también se dan casos de este tipo de duración (en un 15 por 100, más o menos, de los días con estas características). La duración más frecuente es de tres días, si bien se dan series más largas. de más de diez días. Estas son poco frecuentes; aparecen cada cierto número de años, constituyendo auténticas olas de frío por el progresivo enfriamiento de las masas de aire que van llegando. Es el proceso que se desarrolla a finales del año 1970 y principios de 1971. En este caso enlazan con tipos muy fríos y con precipitaciones, pero anticiclónicos. Sin embargo, lo más frecuente -más de la mitad de las veces es que deriven a tipos ciclónicos, fríos o templados, por el avance de las perturbaciones atlánticas que logran desmoronar la muralla anticiclónica que les cierra el paso.

La situación sinóptica del día 31-XII-70 muestra muy claramente lo que ha quedado expresado más arriba: en la altura de 500 mb. , se dibuja un anticiclón cuyo centro se encuentra al sur de Islandia y que tiene su representación en superficie en la misma zona, con un anticiclón de 1028 mb. en su centro. Las borrascas atlánticas ven centrado el camino habitual y se dirigen hacia el sur, donde topan con una masa muy densa por su baja temperatura que no pueden tampoco desplazar, teniendo que dirigirse hacia latitudes más meridionales.

Las isotermas del nivel de 500 mb. son muy expresivas de la expulsión de aire frío

Los embolsamientos en el ápice de la vaguada son también importantes (-36° C sobre el Reino de Valencia) .El flujo proviene claramente a lo largo de los meridianos. -

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

0,4

-11,4

1,6

 

Las precipitaciones son en forma de nieve; los cielos permanecen muy nubosos con algunos claros (26% de insolación).

Esta jornada forma parte de una serie larga de días con el mismo tipo de tiempo y un descenso progresivo de las temperaturas.

 

9. CICLONICO MUY FRIO SIN PRECIPITACIONES

Es un tipo muy poco frecuente. Lo podríamos considerar como un tipo intermedio, poco definido, resto de un tipo de tiempo anterior ya la espera del siguiente. Es decir, que, primero, su característica de muy frío proviene de una situación anterior que es la que ha aportado ese aire frío, generalmente de origen continental; esta situación es de las ya vistas anteriormente, anticiclónica muy fría (Ami) o ciclónica muy fría con precipitaciones (Cmfp). El aire denso que ha llegado se pega a la superficie y permanece estancado hasta que venga algún mecanismo que lo desplace. El mecanismo es una borrasca atlántica que se acerca por -el W y que ataca a La Llanada por el S o SW. Esta depresión, el segundo factor, será la que dé la característica de baja presión conforme ésta descienda antes del paso del frente que se acerca, que logrará barrer el aire frío estancado.

Esta situación queda gráficamente expresada en el mapa adjunto del día 2-170. En él, una borrasca atlántica (988 mb.) centrada al W de Lisboa envía aire atlántico templado sobre la Península. Sobre nuestra comarca hay aire muy frío, formando un colchón sobre ella; el contacto entre estas dos masas de aire, fría y templado-húmeda, se manifestará en La Llanada por una niebla que no despejará en todo el día, contribuyendo a que las temperaturas no se eleven hasta la llegada del frente cálido, que no sucederá hasta últimas horas del día siguiente.

Resumiendo, a una invasión de aire muy frío le sigue un impulso del aire atlántico; en el día intermedio, pues este tipo de tiempo no suele durar más de un día, se produce la situación que comentamos. El paso no se produce, sin embargo, de forma excesivamente brusca, pues el frente cálido suele costarle alcanzar la comarca; así, pues, hay otro día, el siguiente, que se manifiesta como ciclónico, por supuesto, pero frío y con precipitaciones; será al tercer día cuando pase a ser templado y con precipitaciones, con un ambiente mucho más oceánico.

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

2,6

-2,8

-

 

 

Mapa 9

No supone más de un 1,1 por 100 del total; es el tipo de tiempo menos frecuente en invierno dentro de los ciclónicos, con un 2 ,6 por 100 y el penúltimo de todos, seguido por el tiempo interciclónico frío, que aparece menos aún.

 

10. CICLONICO FRIO CON PRECIPITACIONES.

La Llanada alavesa está ubicada dentro de la zona templada; por lo tanto, expuesta a los efectos de la corriente zonal EW que desde el norte de América llega a las costas europeas. Como es sabido, existen una serie de vías de penetración en nuestro continente de las perturbaciones que jalonan dicho flujo y que han sido estudiadas por Pédélaborde (13) Dependerá del lugar por el que hagan la entrada en e1 continente europeo para ver si nos afectan o no; dirección que queda muy ligada a la colocación del anticiclón de las Azores, como resultado de la dirección del jet. De todos modos, existen unas épocas más favorables a que la corriente zonal circule sobre nuestra zona y también unos tipos de tiempo caracteristicos de dicha circulación rápida.

El invierno es una época claramente propicia para que las perturbaciones atlánticas barran el País Vasco. Uno de los tipos de tiempo que más claramente caracterizan a ésta

situación es el ciclónico frío con precipitaciones, por lo que hace referencia a la estación que consideramos; otro tipo de tiempo también típico será el ciclónico templado con precipitaciones; entre los dos existen muchos rasgos comunes. Pues bien, entre ambos representan el 27 por 100 de los tipos de invierno. Si consideramos únicamente los ciclónicos la proporción se eleva significativamente hasta alcanzar valores próximos al 65 por 100. Esto quiere decir que, en efecto, la influencia oceánica en el invierno sobre esta comarca alavesa es muy importante.

Si nos atenemos sólo al Cfp, veremos que supone un 13,3 por 100 del total, ocupando el segundo lugar por orden de frecuencia entre los tipos de tiempo invernales, siguiendo precisamente al ciclónico templado con precipitaciones que tanta semejanza tiene con él. El 30, 7 por 100 de los tipos de tiempo ciclónicos del invierno pertenecen a este tipo. También está en segundo lugar¡ detrás del que hemos citado anteriormente.

Se reparte más o menos de una forma equilibrada entre los meses de la estación, siendo quizás arriesgado el implantar preferencias; así y todo, un rasgo que parece incontestable es la mayor afluencia de este tipo de tiempo en el mes de febrero, y algo menor en enero. Esto concuerda con la idea general de la circulación general atmosférica y el movimiento del frente polar durante el final del invierno. Nótese que la primera mitad de la primavera presenta una frecuencia de este tipo de tiempo muy similar al invierno. Es ya en mayo cuando se nota un notable descenso.

Las situaciones que dan lugar ~ este tipo ya han quedado explicadas, si bien de modo esquemático intentaremos aquí dejarlas algo más concretadas.

En primer lugar, se precisa una circulación zonal rápida. Para ello es preciso que tanto en altura como en superficie los centros de acción positivos y negativos se sitúen en los lugares convenientes, comandados por la corriente en chorro que se orienta siguiendo una dirección EW y que aparece de forma muy clara sobre el océano especialmente. Mientras la corriente en chorro, que circula orientada según los paralelos, enfile el continente europeo al sur del paralelo 55° N es casi siempre seguro que hasta nuestra comarca llegarán los efectos de las perturbaciones atlánticas, siempre que la dirección sea, al menos, E-W; por supuesto que si sufre un giro hacia el sur y se hace del NW o N la influencia será mayor.

En general, podemos decir que cuando los centros depresionarios circulan por Inglaterra hacia los Países Bajos o cruzan el Golfo de Vizcaya hacia el Mediterráneo, o, bien, alguna otra dirección similar o intermedia, sobre nuestra comarca se dará el tipo de tiempo ciclónico frío y -en más del 90 por 100 de los casos con precipitaciones. Para que ello ocurra, sin embargo, debe cumplirse una condición muy importante que será la base principal de la diferenciación de esta clase de tiempo con sus homónimos templados.

La condición es la siguiente: que el flujo de vientos que provienen el océano barran nuestra comarca en dirección a Qriente. Para ello es preciso que no encuentre un impedimento que les obligue a cambiar de dirección. Este impedimento puede ser el anticiclón invernal ruso, o bien el feno-escandinavo alargado hacia el sur, que obliga a la corriente zonal a dar un brusco giro hacia el norte sobre las costas europeas,

dando una componente sur (14). Así pasaríamos a los tipos templados. En nuestro caso, o bien el anticiclón susodicho no aparece, o se sitúa más al este de lo habitual, con lo que no impide el paso del aire a oriente de la Península Ibérica. Un segundo tipo de situaciones, mucho menos numerosas, que también desembocan en este tipo son las que hemos mencionado al hablar del tipo de tiempo anterior, es decir, el paso intermedio entre una masa de aire muy fría y una templada que puede proporcionar un día de las características barotermopluviométricas del Cfp. Las precipitaciones que se recogen son muy variables. Es, en principio, lógico pensar que las cantidades mayores se recogen al paso de las discontinuidades frontales que jalonan las depresiones del Atlántico. Efectivamente, así es; pero hay que hacer una distinción. La cantidad de precipitación recogida al paso de estos frentes depende mucho de la dirección que lleven. Así, los que entren con una componente más marcadamente septentrional -NW , NNW , N-, batiendo de frente el Cantábrico, serán los que más irrigado dejarán el terreno. Cantidades entre 4 y 15 litros son frecuentes al paso de estos frentes. Si, por el contrario, presentan una componente sur en su trayectoria -S, SW, WSW-, o incluso oeste, las precipitaciones son mucho menores, excepto en casos de frentes muy activos y presiones muy bajas. En muchas ocasiones las cantidades son inferiores al litro.

Los tiempos ciclónicos templados con precipitaciones (Ctp) suelen ser antecedentes normales a éstos, por un cambio en la dirección del flujo. En menor proporción pueden antecederlo los ciclónicos fríos o muy fríos. Como último precedente a destacar, puesto que existen más, pero con muy poca repetición, quedaría el tipo anticiclónico frío con precipitaciones, ya que únicamente se precisa un mayor acercamiento de las depresiones para que esto ocurra.

La duración es corta. En la mayoría de los casos no se prolonga más allá de un día. Piénsese que es constante en esta estación el cambio de tipos con precipitaciones o sin precipitaciones, de templados a fríos y ya mucho menos de anticiclónicos a ciclónicos, según el paso de frentes, el cambio de dirección del flujo, etc. Más de un 25 por 100 de las ocasiones se prolongan durante dos días, existiendo series más largas de hasta seis días seguidos pero con muy distanciadas reapariciones.

Deriva hacia tipos de tiempo similares a los que le preceden. El Ctp será en el que más veces desemboque, seguido del ciclónico frío (Cf) .Tiene cierta tendencia a dar en ciclónicos muy fríos con precipitaciones, lo que podríamos considerar como el final de un proceso de flujo del oeste, por acumulación de aire frío debido a las descargas de fin de familia.

El día 15-170, en el grabado, el anticiclón escandinavo aparece muy retirado, con lo que las perturbaciones de la corriente zonal pueden penetrar bastante profundamente en Europa. Sobre nuestra zona al menos, el flujo del W cruza ampliamente, adentrándose en el Mediterráneo, donde se mueven los frentes que preceden a esta corriente. En efecto, durante los días anteriores al 15, el tiempo se mantuvo templado, según la clasificación que hemos adoptado, hasta el paso del frente, Tras él, los vientos rotaron del SW al W o WNW , con el descenso de temperaturas que denota el cambio de tipo de tiempo.

 

Mapa 10

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

9,2

4

0,8

 

La escasa precipitación recogida es expresiva de las cantidades que pueden caer si ya el frente ha pasado pero se mantiene la situación. Únicamente pueden aumentar y sin que atraviesen nuevos frentes, si los vientos soplan del norte, como hemos indicado anteriormente.

Ese dia, la nubosidad es abundante, con un escaso margen de insolación (6%). La humedad relativa alcanza valores entre 60% y 80% .

 

11. CICLONICO FRIO SIN PRECIPITACIONES

Pocas veces se da este tipo, que aparece en el 3,3 por 100 de las ocasiones; considerando el grupo de los de baja presión, quedarla el penúltimo en el orden de frecuencias, por delante del ciclónico muy frío sin precipitaciones (Cmf) .

 

Mapa 11

Se repite con más asiduidad al final del invierno y al principio de la primavera. Es un tiempo muy parecido al anterior, con el que guarda unas relaciones estrechas de antecedencia y sucesión.

En efecto, la situación más repetida es la misma que hemos descrito en el apartado anterior, con la salvedad de que en este caso no existe el paso de frentes, aunque se mantenga el flujo del oeste. En ocasiones, tras el paso de algún frente cesan las precipitaciones, especialmente si el viento no procede del norte o noroeste; si sopla del oeste es fácil que esto suceda, dando como consecuencia el tipo ciclónico frío pero sin precipitaciones.

También puede darse como continuación de días muy fríos si la corriente que proporciona estas masas de aire polares queda cortada, con lo que la temperatura se suaviza, sin llegar a aumentar demasiado. Hasta que no pasen frentes oceánicos, el tiempo se mantendrá seco.

El día 8-1-69 constituye un ejemplo de la primera de las situaciones expuestas. Una profunda depresión de 988 mb. está centrada en la isla irlandesa afectando a Alava en su flanco sur con flujo de vientos del w. Un núcleo anticiclónico colocado en el SW de la Península ayuda a este flujo. Un frente frío ha rebasado ya el tercio norte de la Península sin que tampoco produjera precipitaciones en nuestra comarca, pues los vientos eran de componente sur. El día 8, por efecto de la cuña anticiclónica que despunta a occidente, los vientos pasan al NW .

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

7

0,6

-

El día es bastante despejado, con 7,7 horas de insolación, pero con una humedad relativa elevada, superior a 180% .

Los tipos que preceden a éste son en su mayor parte ciclónicos fríos con precipitaciones y en menor proporción, menos del 30 por 100 de las veces, muy fríos con precipitaciones, tanto de alta como de baja presión.

La duración es de un día, aunque una quinta parte de ellos se prolongan otro más.

 

12. CICLONICO TEMPLADO CON PRECIPITACIONES.

Es el tipo de tiempo que se repite con más continuidad a lo largo del invierno. Es el que más veces aparece y, por tanto, el que representa una mayor importancia estadística. El sólo concentra casi el 14% por 100 de los días de la estación fría. Nos hace pensar en la gran influencia que tiene sobre Alava, o, más concretamente, en este caso, sobre La Llanada, la circulación rápida del oeste. Como en efecto afirma Pédélaborde (15) la circulación zonal del W es una abstracción sin óptica, pero vemos que se presenta con una gran asiduidad en las costas atlánticas de Europa. Nuestra comarca, algo distanciada del mar, pero muy ligada a ella desde el punto de vista sintético, no es una excepción.

Si nos atenemos a las situaciones de baja presión, el porcentaje se eleva considerablemente, por lo que hace mención a su repetición estadística. Es de casi un 32 por 100. Si añadimos los tiempos ciclónicos fríos con precipitaciones, del mismo origen que éstos, y otros relacionados con ellos veremos que los tiempos ciclónicos atlánticos rondan el 80 por 100 de todos ellos.

El último mes de otoño encabeza la lista de frecuencias, descendiendo en el mes siguiente, diciembre, para volver a aumentar durante los meses de enero y febrero, en el que se alcanza una media de ),6 días, muy parecida a la de enero; en la primavera también se mantiene alto el porcentaje. Las situaciones que dan lugar a este tipo de tiempo han sido ya someramente explicadas al ver la diferencia entre éstas y las ciclónicas frías con precipitaciones. En resumen, se trata de la influencia del anticiclón invernal europeo, ruso o fenoescandinavo, influencia que se materializa de modo indirecto. Ya en 1,949 , Zimmerschied resaltó esta relación, comparando los inviernos lluviosos en la Península Ibérica con los inviernos crudos de Europa central!6

Este anticiclón frío bloquea el paso de las perturbaciones atlánticas, que, dirigidas por el jet-stream en circulación rápida, se dirigen hacia el este. La circulación cambia

 

 

Mapa 12

de rumbo enfilando hacia el norte, rozando las costas occidentales de Europa, o, bien, traspasa la depresión de Aquitania o el estrecho de Gibraltar para adentrarse en el Mediterráneo. En una y otra ocasión marcan su impronta en nuestra comarca. Las más significativas son las primeras y las que desfilan por el Golfo de Vizcaya. Resulta interesante destacar la curvatura que sufren las líneas isobaras sobre la Península. Después de seguir una trayectoria groseramente W-E, doblan hacia el nordeste, por lo que los flujos acceden a Alava desde el interior de la Península, desde el SW. preferentemente. Estos vientos del SW. llegan templados por el recalentamiento que sufren al atravesar las diversas cadenas montañosas orientadas EW y llegan templados a la región de Vitoria. Es el castellano, en el lenguaje habitual de la comarca.

Vienen acompañados de discontinuidad es frontales que son las causantes de las precipitaciones. Estos frentes son rápidos en su desplazamiento y no producen, por lo general, lluvias importantes. Los días que obtienen un riego más abundante se deben al paso de una pareja de frentes que cruzan con pocas horas de intervalo. Puede darse el caso de giro de los vientos hacia el NW , con lo que las precipitaciones se acrecientan y las temperaturas descienden.

En el 60 por 100 de las ocasiones, este tipo de tiempo dura un día nada más. Se dan períodos más largos de dos, tres y cuatro días, siendo los de dos los más numerosos, -un 25 por 100 de las veces pero sumando el número de días de uno u otro período la cantidad es similar .

Los ciclónicos fríos y con precipitaciones anteceden a los templados con precipitaciones casi en la mitad de las oportunidades; el resto, en su casi totalidad, lo cubren los ciclónicos templados. La salida más repetida también consiste en los ciclónicos fríos

con precipitaciones (Cfp) en el 64 por 100 de las veces. En más del 30 por 100 de las ocasiones restantes derivan hacia ciclónicos templados sin precipitaciones (Ct). Todos estos tipos ciclónicos atlánticos se revelan con regularidad.

El 22-II-69, una extensa borrasca de 984 mb. centraba en Bretaña domina las costas de Europa Occidental. Un frente frío está terminando de barrer la Península; en altura vemos el flujo del oeste desplazado hacia el sur de su posición habitual.

 

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

11.2

6

0,2

 

La precipitación es muy débil, -el frente ha pasado el día anterior produciendo 4,2 litros debido a la dirección del flujo. La nubosidad es abundante.. sólo un 9% de insolación. La humedad relativa, más baja lógicamente que en los días ciclónicos fríos, desciende en las horas centrales del día. Un último dato destacable es la velocidad del viento; en estas situaciones es, como norma general, superior a otras, sin llegar a alcanzar grandes velocidades más que en ocasiones contadas. U n desplazamiento de alrededor de 20 Km/ h es lo más corriente.

 

13. CICLONICOS TEMPLADOS SIN PRECIPITACIONES.

Estos tipos de tiempo componen un grupo poco numeroso; un 3,7 por 100 del total de días invernales y un 8,5 por 100 de los ciclónicos. El mes en que se repiten con más insistencia es, asimismo, febrero.

Una característica común es su presión más elevada sobre nuestra comarca de estudio que en los casos anteriormente vistos. Como consecuencia, implican menor inestabilidad .

Se producen cuando comienza a notarse la influencia de una baja atlántica que se dirige hacia nosotros por latitudes peninsulares. De ahí que los vientos dominantes sean del sur, secos y templados.

También se derivan del paso por el estrecho de Gibraltar de una de estas depresiones, cuyos efectos en La Llanada se notan por el descenso de la presión, nunca muy acusado, y el flujo de vientos de componente sur, que en ocasiones pueden lograr velocidades relativamente rápidas.

Su duración es, casi sin excepción, de un día y van precedidos y seguidos por tipos de tiempo parecidos, como son los ciclónicos templados o fríos con precipitaciones. En el mapa sinóptico adjunto se observa en altura una vaguada con embolsamiento de aire frío al W de Portugal; quedando la Península en el ramal ascendente. Situación que se repite en superficie. Una baja de 998 mb. se acerca a las costas portuguesas con un frente ocluido que más al sur se bifurca en dos, frío y cálido, a punto de alcanzar la línea de la costa. Sobre La Llanada y toda la Península corre un flujo del sur, que precede al paso de los frentes.

 

Mapa 13

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

11,2

2,4

 

 

La nubosidad es escasa con un 86% de insolación, pero los vientos son fuertes, alcanzándose ráfagas de más de 40 Km/ h.

 

14. INTERCICLONICOS MUY FRÍOS CON PRECIPITACIONES.

Se encuentran a mitad de camino entre los anticiclónicos y ciclónicos muy fríos y con precipitaciones. Prácticamente, sus características son iguales en lo que respecta a consecuencias meteorológicas, con la lógica diferencia .de su presión intermedia. Su explicación viene a ser la misma: un anticiclón de bloqueo, con situación en ( omega) . El flujo proviene del norte o nordeste, con aporte de aire frío de latitudes polares o subpolares.

La influencia de la borrasca y del anticiclón es compartida; de ahí su clasificación como interciclónicos, que se manifiesta en el barómetro de Vitoria. Suelen ir precedidos por tipos fríos con precipitaciones, o, incluso, por templados que, por efecto del anticiclón de barrera y la formación de una borrasca en el Mediterráneo occidental, les dan paso

 

Mapa 14

En alguna ocasión se intercalan en tipos anticiclónicos muy fríos por el descenso de una depresión por el flanco este del anticiclón que no llega a acercarse demasiado. Por último, pueden ser la antesala de la instalación de un tipo ciclónico muy frío y con precipitaciones.

Tras el paso de unos frentes fríos que atacan desde el norte, el día 4-XII-69 se forma una depresión centrada en la llanura del Po al día siguiente -como aparece en el gráfico y entre ella y el anticiclón muy potente, sobre el Atlántico, dan forma a la situación.

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

2,6

0,2

4,5

 

La temperatura es baja, lo mismo que en altura, donde se ve una lengua de aire frío que desciende desde Escandinavia hasta el norte de Africa. Las precipitaciones son de nieve, que es la forma más frecuente de precipitación con esta situación. El cielo permanece cubierto y la humedad es muy elevada.

Es poco frecuente, dado que sólo concentra un 2,6 por 100 de los días invernales, Su duración es de una jornada.

 

 

Mapa 15

 

15. INTERCICLONICO FRIO CON PRECIPITACIONES.

Aparece algunas veces más que el interciclónico anterior, pero no muchas más. Esto se explica porque, aun siendo las situaciones ciclónicas atlánticas muy numerosas, como hemos podido comprobar, los cambios se producen con gran rapidez pues estamos en circulación rápida; los tipos intermedios, interciclónicos, tienen poca cabida.

Este que estamos examinando es un paso intermedio entre los ciclónicos fríos o templados con precipitaciones (Cfp, Ctp) hacia anticiclónicos fríos con precipitaciones (Afp). Tras el paso del último frente de una perturbación atlántica, el anticiclón de las Azores puede avanzar hacia la Península provocando una subida progresiva de la presión atmosférica y una curvatura mayor del flujo para convertirlo en sub meridiano -del NW, por lo general-. Ese momento de paso baja a alta es el que ocupa el tipo interciclónico (Ifp) hasta que se instala un tiempo anticiclónico frío con precipitaciones; las precipitaciones se deben a la procedencia marítima directa del flujo hacia la comarca central alavesa. También puede tratarse, en un 50 por 100 de los casos, de una interrupción en un proceso de tipos de tiempo iguales; es decir, el interciclónico se sitúa entre dos días de las mismas características: ciclónicos templados, o, bien, anticiclónicos templados, ambos con precipitaciones. En el primer caso produciría por el efecto de una cuña anticiclónica que se acerca a nuestra zona, pero no lo suficiente como para que la presión pase a ser más alta de lo normal, mientras que una nueva depresión que sigue el camino de la anterior fuerza a la presión de descender de nuevo.

En el segundo caso, se trataría del proceso contrario: una borrasca se acerca a Álava lo suficiente para que, estando ésta bajo régimen anticiclónico, la presión experimente un descenso para volver a aumentar posteriormente.

La duración es de un día; una vez de cada seis, sin embargo, la situación se alarga otro día más.

El día 9-1-68, a las '00 h., nuestra comarca se encuentra dentro del dominio del anticiclón, envuelta dentro de la isobara de 1024 mb. Una depresión se centra a esa hora en el mar de Irlanda, con tendencia a dirigirse hacia el SE. En efecto, a las 12 horas, según aparece en el mapa adjunto, el centro depresionario ya está sobre Normandía mientras que sobre La Llanada la presión ha descendido tras el paso de la pareja de frentes. El cálido ya ha llegado al Mediterráneo para esa hora. Los vientos provienen del cuarto cuadrante.

A las 18 h. , La borrasca, que se ha rellenado algo, está centrada al SE de París, más cerca, pues, del País Vasco, por lo que la presión ha descendido más. Los vientos tienen una componente norte más marcada.

  

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

9,6

5,2

12,7

 

Las lluvias en estos casos de rotación de vientos hacia el norte son más abundantes.

 

16. INTERCICLONICO FRIO SIN PRECIPITACIONES.

Es el tipo de tiempo que menos seda en todo el invierno. Pueden pasarse inviernos completos sin que aparezca.

Representa el paso de una situación anticiclónica, por dominio del anticiclón continental europeo que desciende hasta nosotros, a otra ciclónica producida por una depresión atlántica que llega por el W. La masa de aire subsidente era fría, pero no mucho; con el acercamiento de la depresión la presión comienza a bajar, mientras que las temperaturas aumentan algo pero sin pasar de ser frías. El flujo comienza a soplar del sur, antecediendo al frente cálido que penetrará por el oeste de la península y afectará al día siguiente a Álaba, pasando a tener un tiempo ciclónico templado.

Mapa 17

 

17. INTERCICLONICO TEMPLADO CON PRECIPITACIONES.

Es de los interciclónicos que más a menudo reaparecen, después de los fríos con precipitaciones (Ifp). Un 2,6 por 100 de los días invernales están representados por este tiempo.

Está muy relacionado con el paso del anticiclónicos fríos o templados o ciclónicos fríos o templados con precipitaciones. Serían interciclónicos con descenso de presión. También se da el caso contrario, aunque menos frecuentemente ya que el paso de baja a alta presión transcurre con más rapidez que el proceso contrario por la mayor inmovilidad de los anticiclónicos.

Por último, y sin agotar las posibilidades, conviene destacar el paso de anticiclónico frío y con precipitaciones (Afp) a anticiclónico templado con precipitaciones (Atp) .

El mapa representado, correspondiente al día 29-170, muestra el tipo interciclónico que se intercala entre un anticiclónico frío con precipitaciones, el día 28, y un ciclónico templado también con precipitaciones (Ctp).

La víspera del día que aparece en el mapa sinóptico era de dominio anticiclónico, todavía bien visible en el mapa de las 00 h. , en el que aún las presiones se mantienen altas a pesar de que ya un frente cálido ha penetrado por la mitad norte de la Península. En el mapa de altura (500 mb.) de las !2 horas es bien clara la corriente del oeste que atraviesa el Atlántico y llega hasta Europa, incluyendo la Península Ibérica. A las 18 h. , en superficie, la situación ya es puramente interciclónica; la presión es intermedia entre el influjo del alta situada al SW y la borrasca del NW .El primer frente, cálido, ya ha

rebasado Alava que se encuentra dentro del sector cálido, con la inminente llegada del frente frío.

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

11,4

7,2

3

 

La cantidad recogida no es grande debido a la dirección del flujo que proviene del W. Casi todo el día el cielo permaneció cubierto, registrándose 0,2 horas de sol únicamente. Al día siguiente la presión se encontrará más baja, por una mayor cercanía del centro depresionario, pasándose a un tipo ciclónico. Asimismo, el frente frío cruzará nuestra comarca siendo la cantidad recogida de 4,4 litros, mientras que los vientos mantienen una dirección constante.

 

18. INTERCICLONICO TEMPLADO SIN PRECIPITACIONES.

Así como los interciclónicos fríos, éstos también son tipos que aparecen muy esporádicamente. El ejemplo del día 29 de febrero de 1968 puede servir para examinar las características más sobresalientes de este tipo de tiempo.

En el primer mapa nos aparece la situación de superficie a las 00 h. La presión es alta en toda la península, sin que los centros positivos ejerzan mucha influencia sobre ella. La Península, efectivamente, se encuentra en un área de unión entre un núcleo anticiclónico colocado al SW y el situado en el norte de Europa. La situación es, pues, de estabilidad. A su derecha está dibujado el mapa de altura (500 mb) a las 12 horas. Se observan los síntomas del cambio. Una lengua fría desciende por el Atlántico hacia el sur dentro de una vaguada ciclónica, que se ha ahondado rápidamente. Debajo de ella se ha formado una borrasca de 1000 mb. en su centro que a las 18 h. se sitúa al W de la Península Ibérica con un par de frentes, cálido y frío, que comienzan a avanzar sobre ella. El descenso de presión es notable en la comarca alavesa, con un paso de alta a baja presión, siempre a la altura de la ciudad de Vitoria.

 

Vitoria

Temperatura máxima ºC

Temperatura mínima ºC

Precipitación mm

12,6

-3,6

-

 

La nubosidad es muy escasa durante todo el día con una amplia insolación que dura más de 8 horas. La calma anemométrica es sustituida a últimas horas por un suave flujo de componente sur. La helada que viene marcada en la temperatura mínima es bastante frecuente en estos tipos cuando su primera fase es anticiclónica. Al día siguiente, ya en primavera, el tiempo es ciclónico puesto que la borrasca atraviesa la Península para

 

Mapa 18

adentrarse en el Mediterráneo, con la temperatura máxima más baja -hay más nubosidad y precipitaciones y la mínima más alta, ya que no hay tanta posibilidad de irradiación como la víspera, pues hay más nubosidad y mayor movilidad horizontal.

 

NOTAS

lO CH P. PEGUY. Précisde Climatologie. Masson, París, 1970. Pág. 46.

11 P. PÉDELABORDE. lntroduction a I'étude scienttfique du climat. S.E.D.E.S. París, 1970. Pág. 104

12 L. GARCIA DE PEDRAZA. La predicción del tiempo en el Va/le del Ebro. Publicaciones del Servicio Meteorológico Nacional. Serie A, n. o 38. Madrid, 1964.

14 A. UR1ARTE.EI régimen pluviométrico en San Sebastián. Revista Munibe (Sociedad de Ciencias Aranzadi). Año XXIX. N." 1-2. San Sebastián, 1977. Págs. 111-164.

15 P. PEDELABORDE.Le climlltduBllssinPlln:rien. Masson. París. 1957.

16 W. ZIMMERSCHIED. Acerca de la relación entre las cantidades de precipitación enla Península Ibérica y la crudeza del Invieno en la Europa central. Publicaciones de1 S.M.N. Madrid. 1949