Lurralde :inv. espac. N. 19 (1996) p. 181-213 ISSN 1697-3070

ESTUDIOS SOCIOURBANISTICOS EN ÁREAS A REHABILITAR:

EL CASO DE ASTEASU (GIPUZKOA)

Recibido: 1996-10-10

 

Ana SOLA BUENO

Carmen SEGUROLA LÁZARO

Universidad de Deusto

Pº Mundaiz 50, San Sebastián

 

LABURPENA. Birregokitze integratuzko aldeen gizarte.hirigintzazko azterlana: Asteasuko adibide. Asteasuko Elizmendi eta hirigune izenekoak hiriguneetan gizarte.hirigintza ezan-garrien ezagutzan datza ikerketa honen arrazoia. Leku honetan populazioa. etxebizitza eta eraikintzaren egoerari buruz egindako azterketa eta diagnostikoari esker. hau posible izan da.

Hitz gakoa: Birregokitze aldeak, gizarte-hirigintzako azterlana, etxebizitza eta populazioa, gune zaharra, Asteasu, Gipuzkoa.

SUMMARY. Sociourban studies in restoring areas: The example of Asteasu (Gipuzkoa) This work evaluates the sociourban characteristics of two urban areas of Asteasu: Casco and Elizmendi, from the analysis and diagnosis of some important aspects as the situation and building state, housing and population.

Key words; Integrated restoring areas, sociourban study, building and population, historical center, Asteasu, Guipuzcoa

RESUMEN. El objeto del presente estudio es abordar las características socio-urbanísticas de las áreas urbanas de Casco y Elizmendi del municipio de Asteasu, a partir del análisis y diagnóstico de aspectos tales como la situación y estado de la edificación, la vivienda y la población del ámbito en cuestión.

Palabras clave: Áreas a rehabilitar, estudio sociourbanístico, edificación y población, casco histórico, Asteasu, Guipuzcoa

1. ANTECEDENTES

En los últimos años ya través de la experiencia adquirida por los diversos estudios abordados desde la Administración de la Comunidad Autónoma del País Vasco en materia de Urbanismo y Vivienda, se ha constatado la existencia de un importante deterioro de buena parte de las áreas urbanas de nuestra comunidad, situándose en primer término aquellas que, conocidas bajo la denominación de "Centros Históricos" se constituyeron en su día como núcleos fundacionales de nuestras Villas, sin olvidar además otras áreas de carácter más rural en ]as Anteiglesias e incluso otras que, aún siendo de reciente formación, participan de importantes niveles de degradación.

Las causas de este deterioro tanto de la propia calidad urbana como de la de la vivienda son múltiples, incluyéndose desde la inadecuación del planeamiento urbanístico hasta la ausencia de marcos normativos y financieros que hubieran posibilitado la puesta en marcha de planes de rehabilitación integrada que dirigieran y canalizaran toda una serie de labores de mantenimiento y mejora de nuestro patrimonio edificado, con especial incidencia, por su interés desde el punto de vista social en el caso de la edificación con uso de vivienda.

Es, por tanto, en función de una realidad constatada como es la de la degradación de prácticamente la totalidad de nuestro patrimonio tanto urbanizado como edificado desde donde se planteó por parte del Departamento de Política Territorial y Transporte de la Administración de la Comunidad Autónoma Vasca la necesidad de adoptar un marco normativo dirigido a hacer frente a este proceso de degradación de las áreas urbanas. Dicho marco quedó establecido con el Decreto 278/1983 de 5 de diciembre, sobre Rehabilitación del Patrimonio urbanizado y edificado (BOPV 189, 24 de diciembre de 1983), según el cual las tareas de rehabilitación deben ser contempladas con un criterio amplio que posibilite tanto la inmediata mejora de la calidad de las viviendas existentes como el impulso a la posibilidad de obtener equipamientos primarios y realizar mejoras de la calidad de los trazados y de los acabados de los espacios urbanos de dominio y uso público. Asimismo, se incide en el hecho de que la acción rehabilitadora debe conjugar aspectos tanto ligados a los valores intrínsecos (economía de recursos, valores culturales e históricos, reactivación de las actividades económicas tradicionales, fijación de la población en su medio urbano) con otros de tipo coyuntural, tales como son el mantenimiento y la creación de puestos de trabajo en una serie de oficios de la construcción, etc.

En este sentido y tal como queda recogido en el artículo 21 del citado decreto, son los Planes de Rehabilitación (PER) la figura de planeamiento urbanístico a través de la cual quedarán concertadas y fijadas todas las, actuaciones de rehabilitación a llevar a cabo por parte de la Administración en las Áreas de Rehabilitación, siendo los Estudios sociourbanísticos de dichas áreas a rehabilitar uno de los documentos esenciales a la hora de elaborar el planteamiento a desarrollar para dichas áreas. La redacción de dichos estudios queda regulada por la Orden de 17 de julio de 1985 del Departamento de Política Territorial y Transportes de la Comunidad Autónoma del País Vasco (BOPV 168, 17 de agosto).

Es precisamente desde la rehabilitación del área urbana del municipio de Asteasu (Gipuzkoa) desde donde se plantea el objetivo principal del presente estudio. Así, el estudio sociourbanístico que se aborda a lo largo del presente documento pretende una aproximación al conocimiento del Area Objeto de Rehabilitación Integrada en el municipio de Asteasu (A.R.I.), a través del análisis de todos aquellos aspectos sociales, económicos, etc., relacionados con la población y con la vivienda y las distintas variables asociadas con las mismas. El mismo fue realizado a mediados del año 1995.

2. ÁREA OBJETO DE ESTUDIO. JUSTIFICACIÓN DE LA PROPUESTA DE DELIMITACIÓN DEL A.R.I. Y METODOLOGÍA

El ámbito objeto de estudio incluye dos zonas diferenciadas, a las que a partir de este momento ya lo largo de todo el estudio, nos referiremos como ZONA DE CASCO y ZONA DE ELIZMENDI (figura 1 ), que en la práctica agrupan a las áreas urbanísticas A-1 (Beheko Kalea), F (Elizmendi), el edificio de Ibargain (Área C), los de Zubiaurre y Sagastume (números 51 y 52) y los números 72, 73, 74 y 75 del Área A-2. Las mismas han sido tratadas, analizadas y evaluadas de forma individual, con objeto de que la futura rehabilitación del A.R.I. considere sus características intrínsecas, "a priori" diferenciables, y de hecho, ya través de los datos que expondremos, diferentes tanto cualitativa como cuantitativamente.

Si bien en su día las Normas Subsidiarias de Planeamiento de Asteasu, aprobadas definitivamente el 18 de octubre de 1994, condicionaron solamente el área A-1 (Beheko Kalea) al desarrollo previo de un Plan Especial de Rehabilitación para su ordenación y gestión, las características intrínsecas del Conjunto Urbano considerado como Casco Histórico de Asteasu llevaron a presentar una propuesta de carácter provisional de ampliar la misma, atendiendo a las características arquitectónicas, históricas y sociales de este Conjunto así como por su semejanza en las condiciones de degradación. Por todo ello, y acogiéndose a la posibilidad que otorgan los Planes Especiales de Rehabilitación (regulación de los aspectos urbanísticos y arquitectónicos tendentes a garantizar la adecuada gestión rehabilitadora) de incrementar los ámbitos de ordenación y gestión tradicionales del Planeamiento Urbanístico vigente, se propuso la delimitación de un área discontinua en la que se incluyó el núcleo de Elizmendi (área F) y algunas edificaciones no pertenecientes a las mismas áreas. Se trató, de esta manera, de incluir todos los elementos edificatorios vinculados a la misma tipología (8-1 asentamientos residenciales antiguos) en el mismo sistema de gestión urbanística y mantener así las mismas condiciones de equidistribución de recursos para las fincas que otorgan todavía al núcleo de Asteasu su calidad ambiental.

Según el documento de Normas Subsidiarias de Planeamiento de Asteasu, que consta también de Texto Refundido, tanto para el área A-1 correspondiente a Beheko Kalea como para Elizmendi se prevén en líneas generales los mismos objetivos urbanísticos de protección del patrimonio existente y reurbanización del área, a pesar de que únicamente para Beheko Kalea se prevea la figura de un Plan Especial de Rehabilitación mientras que para Elizmendi se considere la colmatación de los escasos vacíos edificatorios existentes mediante las correspondientes Unidades de Ejecución.

En su conjunto, el área en estudio es un ámbito de singular estructura binuclear o discontinua en donde sobresalen además del uso residencial, el Religioso-eclesiástico, representado por la Iglesia parroquial de San Pedro (siglo XVI), la casa parroquial Erretotxe y la ermita de Santa Cruz (s.XIV-XV), y el civil con e! edificio de la Casa Consistorial.

En cuanto al aspecto metodológico, cabe señalar que no existe ninguna diferenciación de estas dos zonas por sectores y distritos, ya que el municipio (código 014) incluye una única sección y un único distrito, hecho que implica que el área censal corresponda al conjunto del municipio, mientras que el área a rehabilitar está restringida a un ámbito mucho menor, por lo que su estudio sociourbanístico no ha podido ser abordado, como hubiera sido deseable, a partir de la información correspondiente al último Censo de Población y Vivienda (año 1991 ), ya que dichos datos se refieren al área censal en su conjunto (TM de Asteasu) y no al A.R.I., debido a las consiguientes inexactitudes que de ello se hubieran derivado.

Figura 1. Mapa de Asteasu. Los dos núcleos

En base a lo expuesto, el análisis sociourbanístico de la zona objeto de estudio se ha abordado a partir de la información contenida en los Padrones de Habitantes de los años 1986 y 1991 ya través de la realización de encuestas directas (población y actividades económicas).

3. ANÁLISIS Y RESULTADOS

3.1. Edificación y vivienda

A) Características de la edificación

El análisis incluido en el presente apartado se refiere a las características de la edificación a partir de la relación de edificios existentes y que se detallan en la tabla adjunta.

Calle Nº total de edificios N' Edificios vacíos Edifícios destinados a equipamientos

ZONA DE CASCO

       
Platería 4    
Mayor  31

 

4

(portales 3, 8, 14, 33)

2

(s/n: Ayuntamiento y 42 Hogar del Jubilado)

Nueva 7    
Herreros 1    
Iglesia 3    
de la Fuente 1    
Errekabailara 3 1 (74A)  

ELIZMENDI

Elizmend 25 4 3
Total 75 9 5

 

De forma general, señalar que la morfología urbana de las zonas de Casco y Elizmendi mantiene su estructura original, constatándose que mientras la primera responde a un modelo claro de la calle precedida por la plaza y el ayuntamiento, la segunda corresponde a un crecimiento en torno a la iglesia, aunque en ambas los edificios existentes mantienen las características constructivas originales. En su mayoría, son edificios de planta rectangular aunque los hay de planta cuadrada de disposición exenta, correspondiente a las construcciones más antiguas (siglo XVIII) y ubicadas en mayor número en Elizmendi que en la denominada zona de Casco.

Las construcciones, que responden a una tipología tradicional, poseen muros de carga perimetrales de mampostería ordinaria y refuerzos de esquinas, dinteles y vuelos mediante sillares y piezas de cantería de piedra caliza. Las cubiertas son todas ellas inclinadas a dos aguas y con cumbreras perpendiculares a las fachadas principales en la zona de Casco y paralelas en Elizmendi, respondiendo a un claro ejemplo de una tipología más rural. El perfil edificatorio, salvo situaciones concretas en las que ha habido una adaptación a las características del terreno, responde al modelo de PB+ II+ BC.

En cuanto a los niveles de habitabilidad, y siempre coincidiendo la peor situación con los edificios desocupados y en algunos casos abandonados y en estado de ruina, se obtiene que:

-Un 78% de los inmuebles disponen de buenas condiciones y únicamente el 22% debe de mejorar sus características de ventilación regular.

-Desde los niveles actuales de exigencia a una vivienda, sólo el 50% de las mismas puede considerar su buena condición en número y calidad de los servicios e instalaciones propias ya que e113% es deficitario y el 36,7% es regular.

En cuanto al estado de la edificación, referido exclusivamente a edificación principal, ya partir de haberse considerado cuatro niveles para la evaluación del grado de conservación de los mismos (buen estado, regular, deficiente y muy deficiente o ruina) se establece que en Casco el 46% presenta un estado deficiente, el 38% adquiere el calificativo de regular y el 8% es muy deficiente, porcentaje este último similar al que representa la edificación en buen estado. Existen también edificaciones auxiliares que no tienen porque tener igual nivel de conservación que las edificaciones calificadas como principales. En lo referente a Elizmendi, los datos reflejan que el 44% es deficiente, el 24% está en ruina o es muy deficiente, el 20% mantiene un estado de conservación regular y únicamente el 12% está en buen estado. Estos porcentajes ponen en evidencia, al igual que en Casco, el elevado número de edificaciones en estado deficiente, como corresponde habitualmente a este tipo de áreas objeto de estudios sociourbanísticos y necesitadas de actuaciones integrales de rehabilitación.

La edad de los edificios varía de forma notable. Así, mientras en el Casco predominan las edificaciones del s. XX, siendo solamente anteriores a esta fecha además del conjunto formado por el Ayuntamiento, Eskurrepene (K ale Nagusia 4) y Albistegi (Zilar Kalea 1 ), algunos edificios dispersos que completan la plaza así como las que se hallan al otro extremo de la calle, en Elizmendi puede decirse que el núcleo originario en torno a la Iglesia de San Pedro corresponde al s. XVIII y anteriores, col matándose dicha área a lo largo del s. XIX, a excepción de alguna edificación residencial y el equipamiento escolar que son del s. XX.

En el Casco, el espacio urbano considerado de Interés Arquitectónico e Histórico gira en torno a Nagusi Kalea y a la Plaza, y en Elizmendi se localiza en las inmediaciones de la iglesia de Pedro y de la fuente, zona esta última que se considera tipológicamente integrada y aunque individualmente sus edificaciones carecen de valor histórico-artístico, el conjunto mantiene el nivel ambiental definido por la tipología de alto interés morfológica. El equipamiento escolar se considera no integrado, aunque su incidencia ambiental no es grave dada su ubicación alejada y dispersa del resto de las edificaciones.

B) Características de la vivienda

En relación con el grado de ocupación de la vivienda, los resultados obtenidos para Casco se recogen en la tabla adjunta.

De la visualización de dichos datos, podemos concluir:

* Las viviendas habituales suponen un 71,33% del total frente al casi 30% de las viviendas sin ocupación continuada (temporales y vacías).

* El 70,21% de las viviendas vacías se localizan en la calle Mayor.

* La mayor parte de las restantes viviendas vacías (18,92%) se localizan en la calle Nueva y principalmente en el número 1 de dicha calle

* La única calle en donde no existen ni viviendas vacías ni de temporada es la calle Iglesia.

* La mayor concentración de viviendas se da en las calles Mayor y Nueva que suponen conjuntamente casi el 80% de las viviendas totales existentes en esta zona de Casco.

* El porcentaje de vivienda vacía es bastante significativo (algo más del 25%), mientras que la vivienda de temporada no supone un porcentaje reseñable en el cómputo global.

En el caso de Elizmendi, señalar que en esta zona existen mayoritariamente viviendas habituales o vacías, contabilizándose tan sólo una vivienda de temporada (número 35). El porcentaje de viviendas vacías es bastante similar al constatado para la Zona de Casco, alcanzando cifras del 28,2%, frente al 69,23% calculado para viviendas habituales.

Los mayores porcentajes de viviendas vacías se localizan en edificios vacíos (números 36, 40, 64 y 67), suponiendo el 23, 10% del porcentaje de viviendas vacías, lo que nos indica que el porcentaje de viviendas vacías en edificios con alguna ocupación es bajo (sólo el 5, 1 %).

En lo que se refiere al régimen de tenencia de las viviendas en Casco, y teniendo en cuenta asimismo las viviendas correspondientes a edificios vacíos, se constata que el 71,33% de las viviendas son en propiedad, el 23,08% en arrendamiento y el 5,59% en cesión de uso, generalmente de padres a hijos, no habiéndose detectado ningún otro tipo de régimen de tenencia, como por ejemplo el usufructo.

Se constata asimismo un elevado porcentaje de propiedades verticales que suponen un 43.58% de las edificaciones contabilizadas y que implica "a priori" una ventaja en relación con la rehabilitación, aún cuando algunas de ellas se encuentren ocupadas en régimen de arrendamiento.

Los resultados correspondientes a la distribución por calles del régimen de tenencia indican:

* En las calles Platería y Errekabailara, el 100% de las viviendas son en propiedad.

* Las calles con mayores porcentajes de vivienda en régimen de arrendamiento son:

-Mayor: 22,09%

-Nueva: 21,43%

-Iglesia: 75,00%

-de la Fuente: 33,33%

* Se detecta un único caso de vivienda vacía en régimen de arrendamiento (C/ Mayor 15).

En Elizmendi, el régimen de propiedad y el de cesión de uso suponen conjuntamente el 84,62% (82,06% para la propiedad y 2,56% para la cesión), porcentaje altamente positivo a la hora de abordar la rehabilitación, ya que indica un gran afianzamiento e implantación de la propiedad, que, por otra parte, rinde porcentajes superiores a los constatados para la Zona de Casco. El arrendamiento representa únicamente porcentajes del 15,38%, concentrándose en dos edificaciones

3.2 Población

3.2.1. Evolución de la población

El gráfico 1 muestra la evolución de la población de hecho en el área de estudio (zona de Casco y zona de Elizmendi) así como en el municipio, Tolosaldea y el Territorio Histórico de Gipuzkoa a lo largo del presente siglo (período 1900-1991 ).

Como se deduce de la visualización del mismo, y en una primera aproximación al área de estudio, son de destacar los siguientes aspectos:

* Tanto la zona de Casco como la de Elizmendi han incrementado a lo largo del siglo XX sus efectivos poblacionales, pasándose en el caso del Casco de 186 habitantes en 1900 a 529 en 1991, y en el caso de Elizmendi de 162 (1900) a 270 habitantes (1991 ), cifras que suponen incrementos respectivos del 284% y 166%.

* Resulta especialmente significativo el incremento experimentado en la zona de Casco durante las décadas de los 50 y 60, y especialmente en la última de ellas, pasando de porcentajes de representación respecto al municipio del 17% (1950) a porcentajes de casi el 39% en 1970, y habiéndose mantenido durante las décadas anteriores en porcentajes de entre el 13 y 17%. En las décadas posteriores (años 70 en adelante), el porcentaje alcanza casi el 45%, manteniéndose en torno al mismo hasta 1991, aunque constatándose ya una tendencia descendente progresiva de los efectivos poblacionales.

* En el caso de Elizmendi y aún cuando el incremento del porcentaje respecto al municipio no resulta tan significativo, la tendencia general es de incremento progresivo a lo largo de todo el siglo, pasándose de porcentajes en torno al

12-14% hasta la década de los 40 a porcentajes del 20 a 22% en las décadas posteriores y siendo precisamente en la década de los 30 cuando se constata el incremento más notable (aumento de 119 efectivos poblacionales}, aunque, como en el caso del Casco, se pone en evidencia una ligera tendencia descendente en el número de efectivos poblacionales en los últimos años.

* En conjunto, ambas zonas pasan de representar de entre un cuarto y un tercio de la población total de Asteasu durante las cinco primeras décadas del siglo, a acoger a los dos tercios de la misma en el año 1.991 (casi el 45% la zona de Casco y alrededor del 23% la ZQJla de Elizmendi), lo que indica, si tenemos en cuenta que el municipio gana únicamente y en números absolutos 30 efectivos poblacionales a lo largo del período estudiado, que ha existido un despoblamiento generalizado de otros barrios del mismo, entre los que caben citarse: Goiballea, Errecaballea, Beballea y Upazán, y que corresponden áreas más rurales, caracterizadas por un poblamiento disperso y diseminado (caseríos).

Gráfico 1. Evolución de la población de hecho

Los índices de crecimiento correspondientes al área objeto de estudio, expresados en tanto por mil, se muestran el gráfico 2.

Grafico 2: Indices de crecimiento

A la vista de los datos relativos a la evolución de la población así como de los correspondientes a los índices de crecimiento, podemos concluir que, en líneas generales, caben diferenciarse dos grandes períodos:

* Un primer período, de 1900 a 1970, en el que el Casco, Elizmendi y Asteasu experimentan un incremento de efectivos poblacionales a pesar de las fluctuaciones indicadas en los distintos períodos para cada una de ellas, reflejado en índices de crecimiento positivos que oscilan entre el 4% calculado para Asteasu y el 16,8% calculado para el Casco, como consecuencia de un conjunto de factores, entre los que se encuentran la inmigración, como consecuencia de la prosperidad económica general y de la elevada oferta de trabajo, el incremento de las tasas de natalidad y la disminución de las de mortalidad.

* Un segundo período, desde 1970 hasta 1991, en el que, aún considerando la importancia del potencial inmigrante (más del 50% de la población inmigrante total del siglo) en las tres áreas mencionadas, aunque con porcentajes distintos en cada una de ellas, se constata un decrecimiento progresivo de la población, pudiendo ser caracterizadas como áreas por excelencia emigratorias, al igual que ocurre con otras zonas y municipios de nuestro territorio, y que, por una parte, presentan pocos recursos para atraer población de otros municipios, y por otra, son incapaces de mantener y retener, con su configuración actual, a la población actualmente existente, a todo lo cual se une el descenso de las tasas de natalidad, con la correspondiente disminución del número de miembros de la unidad familiar, y la propia estructura poblacional envejecida, característica del mundo rural.

3.2.2 Estructura de la población

3.2.2.1 Población según sexo

El análisis de la estructura de la población a través del estudio de la composición por sexo de la población en el ámbito de estudio se ha basado en el cálculo del I índice o razón de masculinidad y la proporción de masculinidad. Los datos relativos a estos dos indicadores se detallan en la tabla adjunta.

POBLACIÓN SEGÚN SEXO

 

índice de masculinidad

 Proporción de masculinidad (%)

  1986    1991 1986

1991

Casco

Elizmendi

Asteasu

Tolosaldea

Gipuzkoa

1,14    1,02

0,98    0,98

1,22    1,16

1,03    1,02

0,97    0,97

53,40

49,46

54,91

 50,65

49,32

0,52

49,42

53,69

50,50

49,20

FUENTE: Padrones de Habitantes. Elaboración propia.

 

Tal y como se deduce de la visualización de los mismos, en la zona de Casco predomina el sexo masculino, con valores superiores a la unidad para el índice de masculinidad, y siguiendo la tendencia constatada en el municipio, aunque en éste el desequilibrio por sexo es aún más marcado, en clara relación con su carácter netamente rural. No ocurre así en el caso de Elizmendi, cuyos valores en el índice de masculinidad son más similares a los del Territorio Histórico de Gipuzkoa que a los observados en el municipio y en la comarca. El análisis de la proporción de masculinidad constata una mayor peso del sexo masculino en el conjunto de la población, tanto en el caso de la zona de Casco como en el caso de Asteasu, y en contraposición clara con los datos de Elizmendi en los que existe un predominio del sexo femenino, en porcentajes similares a los del Territorio Histórico.

Los valores correspondientes a la zona de Casco y al propio municipio denotan unos claros desequilibrios demográficos por sexo, los cuales se corresponden con asentamientos típicamente rurales, en los que la población ha estado ligada mayoritariamente al caserío (mayorazgo) ya un estado civil predominante de soltería (alrededor del 56% de la población en ambos casos es soltera). En clara contraposición, se

encuentran áreas como el propio Territorio Histórico e incluso la comarca, con una dinámica poblacional característica de áreas que atraen población, con un predominio de asentamientos urbanos como consecuencia del desarrollo industrial de años anteriores, y en las que el índice de masculinidad presenta valores inferiores a la unidad, reflejo de las alteraciones que produjeron en su estructura poblacional las migraciones laborales así como el predominio del sexo femenino, con una esperanza de vida superior.

En el caso de Elizmendi, los datos son ligeramente distintos, aún cuando el porcentaje de solteros es mayor que en el Casco y en Asteasu (alrededor del 58% Únicamente frente al 56% de las otras zonas), y esto parece deberse, por un lado, al predominio del sexo femenino (téngase en cuenta que en una población de tamaño tan reducido, los hechos casuísticos o puntuales pueden tener gran influencia en el análisis), y por otro, a la mayor esperanza de vida del sexo femenino, tal como se desprende de los datos relativos al estado civil de la población en la zona, que indican que el 100% de los viudos pertenecen al sexo femenino.

3.2.2.2 Población según edad

3.2.2.2.1 Grandes grupos de edad

La disminución de las tasas de mortalidad y como consecuencia el incremento de la esperanza de vida merced a los grandes e intensos avances de la medicina, junto con el significativo descenso de la natalidad, motivado por las nuevas formas de vida de la época actual (ambos miembros de la pareja trabajan) y el avance en los métodos contraceptivos, están configurando en los últimos años un envejecimiento de la población, caracterizada por un predominio de población senil (más de 64 años) frente a la población joven (menos de 20 años), lo que, a medio plazo y de no cambiar la actual tendencia, es síntoma de poblaciones en regresión. La tabla adjunta recoge los datos relativos a los grandes grupos de edad existentes en el ámbito de estudio.

POBLACIÓN SEGUN GRANDES GRUPOS DE EDAD

    Casco Elizmendi Asteasu Tolosaldea Gipuzkoa
1986 0-19 años 136 27 426 13850 209203
20-64 209 54 732 27011 407342
más 64 37 12 126 5104 72677
1991 0-19 95 21 316 11568 173836
20-64 214 50 743 27510 416331
más 64 42 16 146 5989 86064

menor de 20 años supone en Casco 5 puntos más que la de la Comarca y el Territorio, alcanzando porcentajes de casi e136% frente a una población senil (de más de 64 de años) que no alcanza porcentajes del 10%. Sin embargo, y en relación con los datos relativos al año 1991, se constata un significativo envejecimiento de la población, que, aún no alcanzando las cifras comarcales y del Territorio Histórico, pasa de porcentajes del 35,6% en el año 86 para el grupo joven (0 a 19 años) a porcentajes del 27, 1% en 1991, frente a un incremento en el porcentaje del grupo senil del 9, 7% al 12%, aproximándose el comportamiento de los distintos grupos al que experimentan el municipio, la comarca y Gipuzkoa. Este comportamiento es, sin duda, explicable en base a la disminución de las tasas de natalidad, al incremento de la esperanza de vida, y quizás a la posible emigración de la población joven en busca de ofertas de empleo y vivienda.

En Elizmendi, la estructura poblacional en relación con los grandes grupos de edad difiere sensiblemente de la comentada para el Casco así como de la del municipio y la comarca. Esta zona presenta una estructura bastante más envejecida, y con una clara tendencia la envejecimiento, como lo demuestran los datos relativos a los años 86 y 91, a lo largo de los cuales existe un descenso en el porcentaje de población joven de casi cinco puntos (del 29,0% en el 86 al 24, 1% en el 91) así como un claro incremento del grupo senil que pasa de porcentajes del 12,9% a porcentajes de más del 18%, muy superiores en cualquier caso a los del municipio, Tolosaldea y Gipuzkoa.

En el caso de Asteasu, cabe afirmarse que si bien presenta una población algo menos envejecida que las dos zonas estudiadas, su estructura poblacional por grandes grupos de edad pasa a responder a lo largo de estos cinco años a una estructura similar a la de las anteriores.

3.2.2.2.2 Pirámides de población

La estructura piramidal de la población tanto para la zona de Casco y Elizmendi como para Asteasu, Tolosaldea y el Territorio Histórico de Gipuzkoa se recoge en los gráficos 3 y 4.

La primera aproximación a la interpretación de dichas pirámides para las dos áreas en estudio (Casco y Elizmendi) resulta de la observación de su silueta que, en todos los casos y para los dos años grafiados (1986 y 1991), presenta una silueta de tipo convexo o abulbado, característica de poblaciones en envejecimiento y resultado de la combinación de una serie de factores: persistencia de bajas tasas de natalidad que producen el estrechamiento paulatino de la base de la pirámide y progresivo incremento de la esperanza de vida que hacen que en los últimos tramos de la misma el perfil de la pirámide tienda a hacerse paralelo al eje de la misma en lugar de convergente hacia el eje.

Así, en el área de Casco, se constata una estructura poblacional menos envejecida que cualquiera de las restantes zonas, aún cuando se trata, sin ninguna duda, de una estructura correspondiente a una población en vías de envejecimiento. De hecho, se observa un importante descenso de la base de la pirámide en un plazo de tan sólo cinco años, constatándose la disminución de los grupos de reemplazo generacional. Basta señalar que de 1986 a 1991, el grupo que aún no había cumplido un año de edad, pasa de representar un porcentaje del 2,28% de la población total al 1,44%' lo que supone una disminución global del 36% en tan sólo cinco años. Destaca asimismo, el importante descenso de las cohortes de 5 a 9 años y de 10 a 14 años, que disminuyen, la primera en un 50%, y la segunda en un 38,64%.

Gráficos 3 y 4

Se constata, sin embargo, un importante potencial de población en edad de procrear (al margen del tipo de pareja formalizada, legal o de hecho), entre,20 y 44 años, y especialmente entre 20 y 40 años, constatándose incrementos del 5,5% y del 5, 78% para ambos grupos de cohortes, respectivamente, y tratándose de una población capaz de invertir el sentido de la pirámide, aportando a la misma nuevos grupos de reemplazo generacional.

En la zona de Elizmendi y aún cuando se trata también de una pirámide correspondiente a una población regresiva, ésta presenta diferencias sustanciales con la correspondiente a la zona de Casco. En primer lugar, se constata un incremento significativo en la cohorte de O a 4 años, pasando de 1 efectivo en 1986 a 7 en 1991, es decir, un incremento del 700%, aunque, como hemos indicado, hay que tener siempre en cuenta el reducido tamaño poblacional de las poblaciones de las que hablamos. Por el contrario, los restantes grupos de reemplazo generacional sufren un descenso significativ9, especialmente los cohortes de 5 a 9 años y de 10 a 14 años, con disminuciones del 83,33% y del 54,54%, respectivamente.

La población en edad de procrear mantiene diferencias poco significativas respecto a los años 1986 y 1991, constatándose un pequeño incremento en las cohortes de 20 a 24 y de 25 a 29 años, mientras que los restantes grupos mantienen los mismos efectivos en cifras absolutas, pero les corresponden porcentajes mayores habida cuenta de la disminución global de población experimentada por esta zona.

Son especialmente destacables las cohortes de 55 a 59 años y la de 60 a 64, ya que en la primera frente a un incremento significativo de los varones se produce un decrecimiento importante de las mujeres, mientras en la segunda de dichas cohortes la situación es justamente la inversa. Por último, mencionar que en el año 1991 ya partir de la cohorte de 70 a 74 años, se observa que la forma de la pirámide discurre en paralelo a su eje, tanto en lo que respecta a varones como a mujeres, dejándonos patente la tendencia anteriormente señalada hacia el envejecimiento.

En definitiva, y recalcando de nuevo que, dado el reducido tamaño poblacional de las dos áreas objetos de rehabilitación, los fenómenos casuísticos pueden tener una influencia muy grande en la forma de pirámide, nos encontramos frente a una disminución importante de los grupos de reemplazo generacional, con un estancamiento de la población adulta y un afianzamiento de la población senil que, en conjunto, y en un plazo no muy largo de tiempo, generarían una pirámide invertida de no modificarse sustancialmente los comportamientos y factores, ya mencionados con anterioridad, que dirigen la tendencia de la misma. El pronóstico que desde este estudio se hace a partir de la comparación de las pirámides es que, sin lugar a dudas, la gradación del envejecimiento seguirá la siguiente tendencia: primero Elizmendi, luego el municipio, y finalmente el Casco.

A nivel del municipio, cabe reseñarse que la silueta de su pirámide se asemeja más a la correspondiente a la zona de Casco e incluso a la de la Comarca y el Territorio Histórico, pero nos seguimos encontrando con una población en vías de envejecimiento, envejecimiento que, sin lugar a dudas, y teniendo en cuenta el peso que en el conjunto del municipio tienen núcleos como Elizmendi así como otras áreas fuera de la zona de rehabilitación (áreas típicamente rurales), tendrá lugar antes a nivel municipal que a nivel de Casco.

3.2.3 Población según estado civil

Los resultados correspondientes a esta variable se recogen en la tabla adjunta, expresados en porcentajes respecto a la población total.

POBLACIÓN SEGÚN ESTADO CIVIL (1986) (%)

  Casco Elizmendi  Asteasu Tolosaldea Gipuzkoa
Solteros 56,28 58,10 56,00 51,58 48,83
Casados 39,53 37,60 39,33 42,31 44,83
Viudos 3,93 4,33 4,44 5,59 5,51
Separados 0,26 0,00 0,23 0,42 0,64
Divorciados 0,00 0,00 0,00 0,09 0,19
Total 100 100 100 100 100

FUENTE: Padrón de Habitantes. Elaboración propia.

El análisis de los resultados refleja la existencia de diferencias significativas en ! cuanto a la estructura poblacional según el estado civil entre el área en estudio (Zonas de Casco y Elizmendi) y el propio municipio con la Comarca y el Territorio Histórico, diferencias que vuelven a destacar los claros contrastes existentes entre los espacios rurales y I urbanos en cualquiera de los aspectos relacionados con la estructura de la población.

Así, los datos relativos a la zona de Casco y Asteasu reflejan un comportamiento similar, en el que el grupo de solteros representa más del 50% de la población total, con un claro predominio del porcentaje de varones solteros frente al de mujeres (61,2% para Asteasu y 57,7% para Casco). Los casados suponen, en ambos casos, porcentajes de alrededor del 39%, mientras que los viudos representan alrededor del 4%, y los porcentajes de separados y divorciados apenas alcanzan el 0,25%.

En el caso de Elizmendi, la situación respecto al estado civil es sensiblemente diferente, con un porcentaje de solteros (58, 1 %) superior al de ninguna de las áreas analizadas (10 puntos más que el Territorio Histórico de Gipuzkoa y dos más que la zona de Casco y Asteasu), porcentaje que se deriva de la disminución del grupo de casados (37,6%), ya que los porcentajes de viudos, separados y divorciados son bastante similares a los de la zona de Casco y al propio municipio, aún cuando difieren sensiblemente de los de Tolosaldea y Gipuzkoa.

Las diferencias en cuanto al estado civil, están ligadas a las características de "ruralidad" de Asteasu, municipio en el que, de forma general, la población ha estado ligada al caserío como unidad de explotación (mayorazgo) y al poblamiento disperso como asentamiento característico, hecho que se refleja claramente al observar la gradación existente de ámbitos territoriales mayores a menores en el porcentaje de solteros, gradación que está asociada a la mayor o menor "ruralidad" de las mismas: GipuzkoaTolosaldea-Asteasu-Casco-Elizmendi.

3.3 Movimientos de la población

3.3.1 Movimiento natural

Antes de analizar los datos del ámbito de estudio, reflejados en el gráfico 5, merece la pena incidir en el hecho de que dado el período de tiempo para el que se han podido recabar los mismos (tan sólo 9 años) y dado el ámbito territorial tan reducido que abarcan las zonas objeto de rehabilitación, los resultados al respecto deben ser abordados y considerados con máxima cautela y prudencia, ya que, como ya se ha indicado en otros casos, la casuística puede desvirtuar sensiblemente el análisis global. De aquí, que sea más interesante valorar el saldo alcanzado en estos nueve años en su conjunto que únicamente los resultados año a año.

Gráfico 5

En la Zona de Casco, el crecimiento vegetativo es negativo únicamente en los años 1987, 1988 y 1994, siendo positivo en los restantes, con excepción del año 1990 en que su valor es 0. El conjunto del período evaluado ofrece un crecimiento vegetativo de 1. Estos resultados, si bien globalmente, son reflejo de un estancamiento de la población, también lo son, como se deriva de las oscilaciones que sufren sus valores para los distintos años, de la existencia de un importante potencial en edad de procrear, hecho ya comentado al analizar las pirámides de población, y muy interesante desde el punto de vista de un posible cambio de la situación.

En Elizmendi, la situación es bastante similar en relación con los años en los que el crecimiento vegetativo es negativo o positivo, aún cuando las cifras son diferentes, y cuando el análisis del período estudiado en su conjunto, rinde valores para el movimiento natural superiores a los de Casco, que indican un mayor aporte de grupos de reemplazo generacional, tal y como se había constatado al analizar la pirámide de población (cohorte de 0 a 4 años). Sin embargo, global mente esto puede ser considerado más como un hecho de tipo casuístico que una realidad, ya que se trata de una población, en su conjunto, más envejecida que la de Casco, y con un mayor estancamiento de las cohortes en edad de procrear, lo que nos lleva a indicar que este saldo señalado para el período 1986-1994 puede ser sustancialmente alterado añadiéndole tan sólo los datos de 1995 al finalizar el año.

En Asteasu, los valores correspondientes al período que se aportan rinden un crecimiento vegetativo positivo (+ 12), con un saldo negativo para los años 87 y 94, de O para el año 1988, y positivo para los restantes.

Estos resultados, analizados aisladamente, podrían ser reflejo de una población con un ligero crecimiento para el caso de Asteasu y Elizmendi, y prácticamente estancada en el caso de Casco. Sin embargo, analizados en conjunto con otros datos ya aportados (estructura de la población) así como con los que se adjuntarán posteriormente (movimientos migratorios, inmigración, etc.), siguen siendo reflejo de una población en vías de envejecimiento, en la que estos pequeños saldos positivos para el movimiento natural no compensan las pérdidas de población joven y/o adulta por emigración, mayoritariamente en edad de procrear, lo que añadido al incremento de población senil, e incluso al aporte de inmigrantes, muchos de ellos "temporales" (se han constatado que muchos inmigran a lo sumo 1 ó 2 años, a través de sus altas y posteriores bajas) e incluso como unidades familiares consolidadas y que "a priori" no es esperable que incrementen su número de miembros.

Finalmente, y respecto a la Comarca y el Territorio Histórico señalar que ambos ámbitos territoriales se encuentran inmersos en un proceso claro de regresión, con crecimientos vegetativos negativos desde 1991 en el caso de Gipuzkoa, y desde 1989 en el caso de la Comarca (salvo el año 92 ).

3.3.2 Movimientos migratorios

Los movimientos migratorios son otro de los factores de crecimiento que analizaremos en el presente estudio, aún cuando no podamos descender a un nivel exhaustivo de detalle y en profundidad de los mismos, ya que sólo nos ha sido posible recabar información a nivel de las dos áreas objeto de rehabilitación desde el año 1986 (y no todos loS años completos), por lo que a nivel municipal también se ha Considerado el análisis desde dicha fecha.

En general, puede afirmarse que en el conjunto de Gipuzkoa el desarrollo industrial fue la causa principal de los movimientos migratorios que se produjeron a partir de la década de los cincuenta, en la que se produjo un trasvase de población desde las áreas menos dinámicas económicamente a las más dinámicas, al tiempo que dentro de la propia geografía guipuzcoana se generó también un movimiento de personas desde los núcleos o áreas rurales a las urbanas e industrializadas. Las consecuencias más inmediatas de estos movimientos migratorios se manifestaron en la estructura poblacional de los distintos municipios, ya que Gipuzkoa, área inmigrante, recibió población joven en edad de procrear. Paralelamente, se dieron transformaciones espaciales como consecuencia no sólo de las necesidades de esta población sino también de la actividad industrial. La razón económica fue la causa principal de este tipo de migraciones en el sentido que la población inmigrante buscaba un empleo para poder vivir.

En la actualidad, el movimiento migratorio guipuzcoano ha perdido parte de ese componente de búsqueda de empleo y, sin embargo, es la vivienda una de las causas que hace desplazarse a la población hacia las áreas que ofertan este bien a precio asequible o de determinada tipología, siempre y cuando se encuentren en municipios bien comunicados y, en la medida de lo posible, no muy alejados de los grandes núcleos urbanos. Los medios de transporte han favorecido el que la población no tenga porque residir en la misma localidad que la del trabajo.

Tras presentar esta breve introducción nos centramos en abordar los movimientos migratorios en el ámbito de estudio, para lo cual se comentan las características de la población inmigrante en el Casco Urbano en 1986 (año desde el cual se dispone de este tipo de datos) y la existencia o inexistencia de este tipo de movimientos en la actualidad, a partir de las "entradas" y "salidas" registradas en el Ayuntamiento.

POBLACIÓN INMIGRANTE (1986)

CASCO 126 (35,5%)1

ELIZMENDI 24 (6,8%) 1

ASTEASU 355 (1 ,8% y O, 11%) 2

TOLOSALDEA 19307 (6,25%) 3

GIPUZKOA 308709 (44,8%)4

 

FUENTE: Padrón de Habitantes. Elaboración propia.

1: porcentajes respecto a la población inmigrante de Asteasu.

2: porcentajes respecto a la población inmigrante de Tolosaldea y Gipuzkoa 3: porcentajes respecto a la población inmigrante de Gipuzkoa. 4: porcentajes respecto a la población total de Gipuzkoa.

De la visualización del cuadro anterior y del gráfico 6 que representa el lugar de procedencia de la población se obtiene que:

* En el área de Casco, la mayor afluencia de inmigrantes tiene lugar durante los cuatro quinquenios comprendidos entre los años 1961 y 1980, en los que los efectivos poblacionales inmigrantes suponen porcentajes similares, que representan conjuntamente el 70,6% de la inmigración total, frente al 17,5% correspondiente a décadas anteriores, y el tan sólo 11 ,9% correspondiente a la década de los 80. Estos datos vuelven a reafirmarnos en lo ya comentado con anterioridad, en relación con los momentos de prosperidad económica derivados del desarrollo industrial ya la especialización de la industria guipuzcoana a nivel municipal y especialmente comarcal, conociéndose el denominado por algunos autores como "sistema de llamada", que implica la captación de nuevos trabajadores, jóvenes solteros primero, casados después, y finalmente el resto de la familia, configurando a la vez un nuevo componente demográfico joven y en plena capacidad productiva que se superpone a la población autóctona. De esta forma, en la zona de Casco, casi el 20% de la población inmigrante procede de la comarca, básicamente de municipios rurales, y el 47 ,6% del resto de Gipuzkoa, siendo destacable además el 15, 1% de población llegada de Extremadura. La representación de inmigrantes del resto del Estado español o del extranjero no alcanza siquiera porcentajes del 1 0%.

Finalmente, señalar que la zona de Casco acoge al 35,5% de la población inmigrante total del municipio.

* En el caso de Elizmendi, las cifras generales son bastante similares a las de la zona de Casco, aún cuando existen dos quinquenios (1956-60 y 1961-65) en los que no existe inmigración alguna. La época de mayor auge industrial (1966-1980) coincide también con la mayor afluencia de inmigrantes que suponen el 66, 7% de la inmigración total, siendo especialmente destacable el quinquenio 1976-80 que supone, por sí solo el 44,7%. La inmigración a partir del año 81 es prácticamente inexistente y la acaecida antes del año 1956 alcanza un porcentaje del 29,2%. Los lugares preferentes de procedencia de los inmigrantes son, como en el caso de la zona de Casco, la Comarca (33,3%) y el Territorio Histórico de Gipuzkoa (45,8%), siendo especialmente reseñable en este caso, el porcentaje de inmigrantes de procedencia extranjera (20,8%).

A pesar de estas cifras, no parece ser Elizmendi el lugar elegido de residencia y asentamiento de la población inmigrante, ya que ha acogido tan sólo, y según los datos del 86, a un 6,8% de la inmigración total. Este hecho si puede ser explicable en base a las distintas características intrínsecas existentes entre la zona de Casco y Elizmendi, la primera configurada como núcleo central o "corazón" del municipio y, por ende, más desarrollada desde el punto de vista urbanístico (mayor construcción de viviendas, más modernas, etc.) y con un mayor nivel dotacional, frente a la segunda, configurada como núcleo más alejado del centro y con su propia historia, y menos desarrollado urbanísticamente (la mayoría de las viviendas del área de estudio datan de hace más de 110 años y algunos casos la antigüedad es mayor). Esto se ve apoyado también por la existencia de un mayor porcentaje de vivienda en propiedad en Elizmendi que en Casco, propiedad que parece estar más ligada a población oriunda de Asteasu que a inmigrantes.

En la actualidad, y atendiendo al saldo migratorio externo 1986-94, Asteasu es un municipio con un saldo negativo desde el año 1986 (excepción hecha de 1991 en que fue positiva), lo que viene a caracterizar al municipio como un área emigratoria, que contabiliza en todo el período analizado una pérdida de 87 efectivos poblacionales por este concepto, pérdida que nos viene a confirmar que. aún cuando existe una cierta inmigración, ésta es en muchos casos temporal (de acercamiento secuencial hacia otras áreas), o bien es inferior en número a la registrada por la emigración de la población residente, en algunos casos inmigrante y en otros autóctona.

A nivel del Casco, y considerando el saldo migratorio externo de 1990 a 1994, vemos que este es negativo (-1), mientras que el de Elizmendi es positivo (+1), cifras que, aún consideradas con la cautela que requieren, nos vuelven a reafirmar el progresivo y paulatino decrecimiento de la población, la tendencia al despoblamiento y la incapacidad del municipio y de las dos áreas de estudio en cuestión de retener a la población residente.

Población inmigrante según año de llegada (1986)

Por lo que se desprende de lo expuesto, tanto Asteasu como las áreas en estudio han atraído población inmigrante aunque en los últimos años el saldo migratorio externo es negativo en Asteasu y tendente a "0" en Eizmendi y Casco. Según los datos de empleo industrial generado en esta localidad, son frecuentes los movimientos diarios que se registran por la llegada de trabajadores a los centros industriales desde los municipios cercanos (Villabona, Zizurkil, ...), todo lo contrario de lo que sucede con la población activa terciaria residente en Asteasu con niveles superiores al empleo que se registra en el mismo.

3.4. Origen de la población

En este apartado y en base a los datos de 1991, analizaremos el origen de la población en las dos zonas objeto de estudio, Casco y Elizmendi, entendiendo por origen el lugar de nacimiento de la población residente. Este apartado está, por tanto, y al menos en una gran medida, en estrecha relación con el apartado correspondiente a inmigración, aún cuando cabe hacerse dos consideraciones:

* no todos los inmigrantes han procedido de su lugar de nacimiento, y

* existe población oriunda de Asteasu, bien del Casco o bien de Elizmendi, que por su lugar de nacimiento, y concretamente que habiendo nacido en Donostia-San Sebastián, sería considerada inmigrante, y que, en realidad, no lo es, ya que se trata de simples fenómenos relacionados con el lugar del alumbramiento.

-Zona de Casco: el 47,58% de la población ha nacido en el municipio, el 56, 13% en la Comarca y el 84,63% en Gipuzkoa, frente al 15,38% de los nacidos en el resto de la CAPV (0,57%) o en el resto del Estado y en el extranjero.

-Zona de Elizmendi: los porcentajes son bastantes superiores en algunos casos a los calculados para la zona de Casco. Ascienden al 50,57% para la población nacida en el municipio, al 63,21% para el caso de la Comarca y al 90,8% para los de Gipuzkoa frente al 9,20% correspondiente al resto (Estado y extranjero). En esta fecha de referencia no había ninguna persona residente nacida en Bizkaia ni en Araba.

Los datos relativos a Asteasu son bastante similares a los de Elizmendi, con un porcentaje del 90,04% para la población nacida en Gipuzkoa, lo que viene a confirmarnos lo ya indicado con anterioridad en algunos otros apartados, que es que Elizmendi, como núcleo, guarda una mayor tradición y semejanza con lo que ha sido Asteasu a lo largo de la Historia (municipio típicamente rural) que la zona de Casco, que ha acogido no sólo mayor población inmigrante, sino que podríamos decir que ha transformado en una medida superior, o al menos, a una velocidad superior, guardando, en la actualidad, menos relación con la tradición y cultura de Asteasu que Elizmendi.

La comparación de estas cifras con las Correspondientes a T010saldea y al Territorio Histórico indica un mayor porcentaje de nacidos en el municipio y en Gipuzkoa y un menor porcentaje de nacidos en la Comarca, lo que apunta que la mayor parte de los inmigrantes procedentes de Gipuzkoa lo han hecho de comarcas distintas a Tolosaldea, hecho que también ha sido contrastado a través de los Padrones del 86 y del 91, en el que se han constatado que una buena parte de los inmigrantes proceden de comarcas como Urola-Costa (frecuentemente del municipio de Aia).

3.5. Nivel de Instrucción

El análisis de los datos de 1991 nos vuelve a poner de manifiesto la caracterización de las áreas en estudio y del municipio al que pertenecen como áreas rurales, en las que un porcentaje bastante significativo de la población tiene como máximo estudios primarios. Así, dichos porcentajes son:

* Zona de Casco: 71,51%

* Elizmendi: 73,56%

 * Asteasu: 74,61%

En todos los casos, el porcentaje de analfabetos alcanza valores comprendidos entre el 1 y el 2%.

Estos resultados difieren ligeramente de los obtenidos para Tolosaldea y el Territorio Histórico, en donde los porcentajes de población con estudios primarios como máximo son del 58,00% y 52,34%, respectivamente.

En lo que se refiere a estudios profesionales, los porcentajes correspondientes a las distintas zonas son: 5, 13% para el Casco; 5, 75% para Elizmendi y 4,98% para Asteasu, frente a porcentajes de casi el doble para la Comarca y el THG.

La enseñanza secundaria tiene porcentajes del 5, 70% en la zona de Casco, 0% en Elizmendi y 3,24% en Asteasu, frente a valores del 8,87% en Tolosaldea y del 12, 73% en Gipuzkoa.

Las cifras correspondientes a la enseñanza media-superior y superior difieren sensiblemente en las distintas zonas estudiadas. Así, en la zona de Casco el porcentaje es de 3,99%; en Elizmendi, del 8,05% y en Asteasu del 2,90%, frente a porcentajes de 5,07% y 7, 19% para la Comarca y el THG, respectivamente.

De estas cifras, destaca especialmente la correspondiente a Elizmendi, que responde, sin embargo, a una situación singular, como la que se deriva del hecho de que en el momento de realización del Padrón de 1991 residían habitualmente en Elizmendi dos sacerdotes, ambos con estudios superiores (uno de ellos incluso Doctorado), lo que incrementa sensiblemente el porcentaje de población con estudios medios-superiores. El porcentaje, descontada esta población "singular", se reduce al 5, 75%, más similar, por tanto, al de la Comarca, aún cuando se encuentra sensiblemente por encima de la zona de Casco. La razón fundamental quizás pueda estar relacionada también con el mayor porcentaje de población inmigrante en la zona de Casco que en la de Elizmendi, población generalmente sin estudios o sólo con estudios primarios, que tiene un peso importante en el conjunto del área. Por el contrario, y tal como hemos observado en otros apartados, Elizmendi parece ser un núcleo más consolidado desde el punto de vista de afianzamiento de la población autóctona, y en el que la población joven que cursa estudios medios o superiores sigue residiendo en el domicilio familiar, incluso al finalizar éstos debido a la escasa oferta de empleo en el actual momento de crisis. Esta razón es también válida para la zona de Casco, aunque como ya hemos explicado, el peso de los inmigrantes disminuye el porcentaje con nivel de instrucción medio-superior.

3.6 Actividad de la población

3.6.1 Población activa

La población activa, bajo la definición tradicionalmente aceptada para la misma, incluye a todas aquellas personas empleadas en la producción de bienes y servicios así como a aquellas que buscan empleo. El gráfico 7 recoge los datos de población activa y las tasas de actividad de las dos zonas objeto de estudio así como las del municipio, la comarca y el T.H.G. De la visualización de los mismos se deduce que:

* La distribución por sexo de la población activa presenta diferencias significativas entre las zonas de Casco y Elizmendi, siendo 4 puntos superior el porcentaje de varones activos que en Elizmendi, y, por ende, 4 puntos menor el de mujeres activas.

* Las tasas de actividad de las zonas de Casco y Elizmendi son superiores a las de la Comarca y el Territorio Histórico, estando la de Elizmendi casi 1 punto por encima de la del Casco, aunque ambas se sitúan por debajo de la correspondiente al municipio, que supera en más de 8 puntos al conjunto de Gipuzkoa.

*La comparación de las tasas de actividad entre los años 1986 y 1991 refleja diferencias significativas entre el municipio, la Comarca y el THG, de forma que mientras en el municipio disminuye en casi 3 puntos, en la Comarca se incrementa en 2,2 y en Gipuzkoa en 3,2, aún cuando tanto en el año 1986 como en el 91 el municipio sigue manteniendo porcentajes superiores a ambos.

En este caso, cabe señalarse que por la diferencia en relación con la edad de la población activa entre las dos fuentes consultadas (la de 1986 se refiere a la de 15 y más años y la de 1991 a la de 16 y más años), el incremento real de la tasa de actividad de la Comarca y del Territorio Histórico sería mayor, mientras que la disminución de dicha tasa a nivel del municipio sería menor, ya que el 1 ,6% de dicha disminución corresponde según los cálculos efectuados a la diferencia de las fuentes (los activos de 16 y más años en Asteasu serían 612 y no 622).

Las razones fundamentales de las diferencias constatadas en las tasas de actividad entre las áreas objeto de rehabilitación y Asteasu respecto a la Comarca y el Territorio Histórico son explicables, por una parte y como se desprende de la tabla de población en relación con la actividad, por la menor incidencia del paro, y, por otra, en función de un peso ligeramente superior de la población inactiva (especialmente en el apartado de Labores del Hogar) en relación con el total de la población así como de la propia estructura poblacional, existiendo prácticamente la misma secuencia de ámbitos territoriales entre las tasas de actividad de mayor a menor (Asteasu-ElizmendiCascoTolosaldea-Gipuzkoa) que para los porcentajes de población inactiva respecto a la total y para la población parada de menor a mayor (Asteasu-Elizmendi-Casco-Tolosaldea-Gipuzkoa).

3.6.1.1 Población activa ocupada

Los datos relativos a este aspecto junto con los correspondientes a las tasas de ocupación, referidos de nuevo al Padrón de 1986, y comparados a nivel municipal, comarcal y de Gipuzkoa con los de 1991 se recogen en el gráfico 8.

De la visualización de los mismos se percibe una disminución de 4 puntos en la tasa de ocupación a nivel municipal, frente al significativo incremento de la misma tanto a nivel comarcal como de Gipuzkoa, lo que en cifras absolutas supone para Asteasu una disminución de 91 efectivos poblacionales (esta cifra sería en realidad algo menor atendiendo a las diferentes fuentes), que, por establecer una comparación, supone prácticamente toda la población de Elizmendi en 1991.

Las razones que pueden explicar este comportamiento, como se confirmará posteriormente con datos relativos a la población parada, hay que buscarlas, por una parte, en el incremento del paro que, a nivel municipal y para el mismo período se incrementa en 3 puntos, y, por otro, en la propia disminución del conjunto de la población activa que experimenta una caída también significativa.

No obstante, y a pesar de la tendencia negativa señalada a nivel municipal y extrapolable a las dos áreas objeto de rehabilitación, quedan claramente reflejadas las mayores tasas de ocupación en dichas áreas y en el municipio frente a Tolosaldea y Gipuzkoa para el año 1986, aún cuando existe un notable acercamiento de sus valores en el año 91. La mayor tasa de ocupación se constata en Elizmendi, seguido de Asteasu, y de la zona de Casco.

Estos porcentajes ponen nuevamente de manifiesto las características intrínsecas de las áreas típicamente rurales frente a las urbanas-industriales, hecho constatado también por los valores obtenidos en Casco, que son inferiores a los de Elizmendi y a los del municipio, siendo precisamente la zona de Casco la zona "más urbana" del municipio, aunque su población no tiene entidad suficiente para desvirtuar el comportamiento global, ya que el poblamiento disperso ligado al caserío tiene una incidencia muy importante.

Grafico 8

Asimismo, cabe señalarse que, al menos hasta la fecha del Padrón del 86, las dos áreas objeto de rehabilitación y el municipio no han visto afectada su estructura poblacional en relación con la población activa ocupada a causa de la inmigración dado que, en su mayoría, dicho potencial inmigrante se habría desplazado al municipio tras obtener un puesto de trabajo, puestos que, en el cómputo global de las zonas de estudio, y aún cuando se hubieran podido ver afectados, en alguna medida, por la crisis y el consiguiente paro, no han afectado tanto como en la Comarca y en Gipuzkoa a nivel porcentual, ya que la alta ocupación en el sector agrario ha podido absorber algunas horas de otros sectores a nivel municipal, compensando parcialmente dicha pérdida.

Sin embargo, y como se desprende de la tendencia municipal en el período 8691, hay una disminución importante de la tasa de ocupación, derivada, en parte, por el aporte de activos (consecuencia de la explosión demográfica de los 60-70 y muchos de ellos hijos de dichos inmigrantes) que pasan a engrosar las filas del paro.

3.6.1.2 Ocupación según sectores económicos

Los resultados correspondientes al análisis de los cuatro grandes sectores de actividad en las distintas zonas de estudio se reflejan en el gráfico 9, donde se aprecia, una vez más, la tipología característica de Asteasu como municipio rural, a la vez que se pone en evidencia que la zona de Casco se aproxima más en su comportamiento a un área urbana que la de una rural. Basta con comparar los porcentajes de ocupación en el sector primario, muy superiores en Asteasu y Elizmendi que en Casco, aún cuando todos ellos son superiores a los de la Comarca y Gipuzkoa, con diferencias de hasta 32 puntos (entre Gipuzkoa y Asteasu).

En lo que se refiere a los restantes sectores económicos, llama la atención el elevado porcentaje de ocupación en el sector servicios en la zona de Casco (se comporta como un área central, al concentrar los mayores porcentajes de servicios), cifras relativas que se explican, en gran medida, por las propias actividades económicas implantadas en el área, todas ellas y tal como se desprende del trabajo de campo pertenecientes a este sector de actividad y consistentes fundamentalmente en tiendas de comestibles, carnicerías y bares-restaurantes (sectores Hostelero y de Comercio al por menor), todas ellas dirigidas por personas que viven en el zona e incluso en la misma casa en la que se localiza la actividad.

Ocupación según sectores económicos (1986)

Por el contrario, los datos para este sector en Elizmendi y Asteasu son bastante inferiores a los de la Comarca y Gipuzkoa, y se deben, en buena parte, a la ausencia total de actividades en este sector tanto en Elizmendi (sólo se ha contabilizado una actividad económica de panadería) como en Asteasu, restándole la zona correspondiente al Casco.

La ocupación en el sector de la construcción no difiere tan significativamente entre los distintos ámbitos territoriales estudiados, aunque es ligeramente superior en las dos zonas a rehabilitar (preferentemente en Casco) y en Asteasu que en Tolosaldea y Gipuzkoa.

La ocupación en el sector secundario alcanza en Elizmendi porcentajes similares a los de Gipuzkoa e inferiores a los de la Comarca, mientras que en Casco y Asteasu, los porcentajes son bastante inferiores, compensándose por los mayores porcentajes de ocupación en el sector servicios en el caso del Casco, y en el sector primario en el caso del municipio. Por los datos aportados con anterioridad se genera más empleo industrial que los ocupados en este sector y residentes en este municipio. Todo lo contrario sucede con los servicios.

Respecto a la situación profesional de esta población ocupada, destaca fundamentalmente:

* El mayor porcentaje de autónomos en la zona de Casco y en Asteasu, respecto al propio Elizmendi, la Comarca y Gipuzkoa.

* El menor porcentaje de asalariados tanto en Casco como en Elizmendi y Asteasu, con diferencias que oscilan entre 10 y 23 puntos respecto a la Comarca y Gipuzkoa.

* El elevadísimo porcentaje de situaciones de ayuda familiar en las dos zonas objeto de rehabilitación y especialmente en el municipio, con diferencias respecto a la Comarca y Gipuzkoa de hasta 22 puntos. A este respecto, señalar que el porcentaje de esta situación profesional de ayuda familiar de Asteasu en relación con la Comarca es del 35%, cifra, por tanto, muy significativa y ligada a las características de ruralidad del municipio (se trata de ayudas familiares ligadas en buena medida a las explotaciones agrarias: producción de leche, etc.).

* El notable porcentaje de eventuales, especialmente en la zona de Casco, aún cuando en Elizmendi y en Asteasu se superan también los porcentajes de Tolosaldea y Gipuzkoa y que podrían suponer además, al menos en algunos casos, población que, en plazo relativamente corto, pasará a engrosar las cifras del paro.

De nuevo, vuelven a constatarse las diferencias cuali- y cuantitativas existentes entre la zona de Casco y la de Elizmendi, quedando patente que se trata de dos zonas que han evolucionado de forma muy distinta ya diferente nivel: la zona de Casco con tendencia a reafirmarse en su calidad de área urbana y central, y la de Elizmendi que sigue manteniendo su carácter rural, en clara relación al espíritu general del municipio y, por ende, de la mayoría de1os núcleos de población y del poblamiento.

3.6.1.3 Población activa desocupada (población parada)

Las tasas de paro calculadas en base a los datos de la población parada reflejan que la misma es sensiblemente menor en las dos zonas objeto rehabilitación y en Asteasu que en la Comarca y el Territorio Histórico. Las menores diferencias con estos dos ámbitos territoriales corresponden a la zona de Casco (5 puntos), y las mayores a Elizmendi, con diferencias de 14 puntos. De nuevo, se constata:

* El diferente comportamiento de las zonas de Casco y Elizmendi

* La ruralidad intrínseca de Asteasu como municipio que, al no haberse configurado como municipio industrial, no se ha visto tan afectado por la crisis económica, especialmente la industrial y ligada a determinados subsectores económicos, que han experimentado otros ámbitos territoriales.

Sin embargo, ya nivel municipal, y extrapolable sin mucho riesgo a equivocarnos a las dos áreas a rehabilitar, se constata un incremento de prácticamente 4 puntos en la tasa de paro en 5 años (1986-1991), frente a la disminución de la misma a nivel comarcal y provincial.

Las razones que parecen haber motivado esta tendencia podemos encontrarlas, en primer lugar y como ya se ha señalado, en el alto porcentaje de eventuales existente en el año 1986 en las zonas objeto de PER y en Asteasu, y que quizás en el 91 se encontraban ya engrosando las cifras municipales de paro, y en segundo lugar, al drástico descenso a nivel municipal de la ocupación en el sector primario que de representar el 36,3% en el año 1986 pasa al 15,2% en el 91.

Esta disminución de casi el 50% en la ocupación en el sector primario está ligada, por una parte, a la propia estructura poblacional, en la que el sector primario está liderado por una población de edad bastante avanzada y, por otra, a las reestructuraciones del sector motivadas por el ingreso en la Unión Europea (UE) que ha supuesto, entre otros hechos, la desaparición. de las explotaciones agrarias menos viables y la disminución del volumen de producción del sector junto a un incremento de las jubilaciones anticipadas.

3.6.2 Población inactiva

Con objeto de obtener una aproximación real a la situación, tratando la inactividad a partir de la edad que se estima apta para trabajar, se han elaborado las tablas correspondientes a la población inactiva de 15 y más años, dado que, aunque lo correcto hubiera sido hacerlo con población de 16 y más años, ello no ha sido posible por la forma en que se presentan al respecto los datos de Padrón.

Los resultados indican lo ya reiterado a lo largo de este estudio en el sentido de que nos encontramos ante áreas que han iniciado, en mayor o menor grado su regresión (más Elizmendi), en las que los porcentajes de inactivos en edad de trabajar son bastante superiores a los de Gipuzkoa, como consecuencia, por una parte, del importante peso que tiene la población senil, y, por otra, del incremento considerable en el número de estudiantes, hecho ligado sin duda a un mayor desarrollo y cultura, y claramente reflejado en el caso de la población senil por el porcentaje de Elizmendi, superior al de todos los ámbitos territoriales referenciados.

POBLACIÓN INACTIVA DE 15 Y MÁS AÑOS (1986)  

  VARONES MUJERES TOTAL
CASCO 43 (33.86%) 84 (66.14%) 127 (57,73%)
ELIZMENDI 10 (28,57%) 25 (71.43%) 35 (66,04%)
ASTEASU 122 (32,62%) 252 (67,38%) 374 (56.50%)
TOLOSALDEA 5000 (28,65%) 12450 (71,35%) 17450 (63.70%)
GIPUZKOA 34903 (17,39%) 165846 (82.61%) 200749 (47,78%)

*Porcentaje respecto a la población inactiva total

FUENTE: Padrón de Habitantes. Elaboración propia

 

4 CONCLUSIONES Y DIAGNÓSTICO

-Ante el importante nivel de deficiencia en servicios e instalaciones de las viviendas al igual que en las condiciones constructivas de algunos inmuebles sería conveniente, para mejorar la calidad de las mismas y por ende de las personas que en ellas habitan y de las propias zonas en cuestión, potenciar e incentivar la rehabilitación. Esta política de rehabilitación contribuiría, asimismo, a recuperar el nivel de ocupación ( 1, 76 hab./vivienda) ya que las viviendas vacías superan la cuarta parte de las existentes, siendo especialmente significativo el bajo nivel de la calle Mayor. En este sentido hay que valorar positivamente la alta disposición de los residentes encuestados (80,4% y 93% respectivamente) a la hora de afrontar la rehabilitación con ayudas institucionales. En los casos de vivienda en arrendamiento, régimen muy representativo en las calles Iglesia y de la Fuente, no parece ser un impedimento especial para abordar la rehabilitación, dado que, por una parte, las viviendas arrendadas corresponden a propiedades verticales cuya titularidad recae en vecinos de la misma zona o del propio municipio y, por otro, el interés de muchos de los inquilinos por adquirir la vivienda en propiedad.

-El área estudiada ha entrado ya hace algunos años en una fase de regresión, caracterizada no sólo por la disminución paulatina de los efectivos poblacionales, sino también por un envejecimiento progresivo y gradual de la población, hecho que, en un plazo no muy largo de tiempo puede suponer un despoblamiento importante tanto de las dos zonas objeto de rehabilitación como del propio municipio, con el consiguiente abandono de actividades tradicionales como las agropecuarias y forestales que caracterizan al conjunto de Asteasu.

-Los datos. tanto para Casco como para Elizmendi. parecen mostrar una tendencia a la emigración de la población autóctona. aunque este movimiento migratorio parece haber sido compensado durante algunas décadas por la inmigración. Sin embargo. se constata que poco a poco el balance global de saldos migratorios se va inclinando hacia valores negativos. motivado. entre otras razones. por la escasa capacidad que parece tener Asteasu para atraer población ni en relación con la oferta de empleo ni en relación con la de vivienda y para mantener y retener a su población residente.

-En las dos áreas de estudio, se constata una ligera tendencia a la disminución de la tasa de actividad, lo que, unido a una situación en relación con la estructura poblacional que implicará que las cohortes de 55 a 59 años y de 60 a 64 años pasarán a engrosar el capítulo de inactivos, no existiendo grupos de reemplazo generacional que compensen dicha pérdida, hace prever para las zonas una paulatina disminución de dicha tasa a corto-medio plazo. Esta situación, nada favorable, podría verse empeorada si continúan los niveles de desempleo.

-Hoy por hoy, y atendiendo a loS datos de empleo y ocupación, Asteasu es una localidad en donde el número de personas activas ocupadas (463 personas en 1991) es similar al empleo generado en el propio municipio. No obstante, si se analiza este aspecto por sectores económicos sucede que mientras en el secundario la ocupación de la población residente supone menos de la mitad del empleo generado en Asteasu, en el terciario sucede todo lo contrario (la población residente que trabaja en este sector es casi el triple del empleo generado en los servicios en la localidad.

-Tanto Asteasu como cualquiera de las entidades y núcleos de población que lo integran, incluyendo las dos zonas objeto de rehabilitación, sólo parecen ser capaces de atraer población tanto en cuanto se trata de un ámbito territorial que está próximo a la cabecera comarcal ya otras zonas industrializadas vecinas (Villabona, Andoain, etc.), y bastante bien comunicada con ellas, por lo que quizás parece haberse configurado como una residencia "temporal" de una población a la espera de lugares y ofertas mejores. Llama la atención el hecho de que buena parte de la población activa residente en Casco y en Elizmendi que trabaja en los sectores secundario y de construcción no corresponde al empleo generado en estos mismos sectores en el propio municipio (la gente ocupada en estos sectores en cualquiera de los ámbitos a los que nos referimos lo hace en otros municipios de la Comarca o incluso de Donostialdea: Lasarte), existiendo tan sólo un desarrollo del sector primario, que ocupa básicamente a población oriunda y de una edad avanzada (en porcentajes diferentes en Casco y Elizmendi), y un ligero desarrollo del sector servicios, básicamente tiendas de comestibles y bares-restaurantes, que no llegan a emplear, en ningún caso, a más de 1 ó 2 personas de la misma unidad familiar.

-Es importe potenciar la creación de empleo y mantener la actividad existente siempre y cuando ésta no sea molesta, insalubre, nociva o peligrosa, con el fin de retener y atraer población. Teniendo en cuenta el paraje donde se encuentran estos núcleos urbanos sería aconsejable y favorable impulsar actividades relacionadas con el ocio, tiempo libre, etc.

-Es necesario frenar el nivel de deterioro y mejorar la calidad del conjunto del Casco Histórico (Casco y Elizmendi), el cual se contempla como una referencia de un pasado histórico-cultural que debe ser conservado para el futuro y más teniendo en cuenta que estos dos ámbitos han mantenido bastante bien sus características estructurales originarias y parte de su patrimonio edificado que data de los siglos XVII-XVIII.

-La mejora del conjunto del espacio urbano de las zonas de Casco y Elizmendi incluye una serie de actuaciones interesantes para elevar la calidad del mismo, entre las que se encuentran creación de espacios verdes, recuperación de la plaza, mejora del entorno de la parroquia de San Pedro, del nivel de equipamientos, de la estructura viaria, recuperación de las traseras de algunos edificios, mejora de servicios urbanos como por ejemplo la deficitaria red de saneamiento que en la actualidad consiste en utilizar la regata como colector municipal, actuaciones que además conseguirían no sólo frenar la emigración de la población sino atraer a personas y familias de otros municipios. En este sentido cabe referenciar que teniendo en cuenta la estructura poblacional hacia un envejecimiento, tanto del área en estudio como del conjunto del municipio, sería aconsejable y necesario el plantear una política de vivienda orientada especialmente hacia la fijación de la población joven en Asteasu y sobre todo de aquellos jóvenes que van a constituir un nuevo núcleo familiar pues contribuirían, con el tiempo, a aportar los grupos de reemplazo para ampliar la base de la pirámide poblacional. Es obvio indicar que la regulación de la nueva edificación pasa por responder a las características tipológicas existentes en las áreas.

-Las cifras apuntan, sin duda alguna, a una situación preocupante: por una parte, Asteasu romo municipio típicamente rural pierde un importante porcentaje de

ocupación en el sector primario, por otra, se trata de un municipio que no ha sido capaz de llevar a cabo una oferta de vivienda que atraiga y retenga población, y, por último y ligado a lo anteriormente señalado, que no ha sido capaz de que las personas ocupadas en el empleo industrial generado en Asteasu hayan fijado su residencia en el municipio. Por todo ello, la previsión es que, a medio plazo, no se podría descartar un despoblamiento generalizado (y quizás con él las pocas actividades existentes del sector servicios, regentadas en la mayoría de los casos por una población de edad también avanzada y que no ve continuidad de la misma en ningún miembro de la unidad familiar).

-Ante todo lo expuesto, es interesante y necesario que desde las Instituciones, Administraciones y restantes Organismos, conscientes de esta situación, se fomenten y aborden toda una serie Planes Estratégicos, tendentes a dinamizar y potenciar estos espacios, desde la consideración de:

-búsqueda de nuevos modelos de desarrollo rural (Desarrollo Rural Integral) capaces de generar empleo y retener a la población existente.

-incremento de la capacidad de Asteasu para atraer población urbana de áreas industriales y densamente pobladas, bien como residencia habitual o bien como segunda residencia, teniendo en cuenta la demanda actual de nuestra sociedad que reclama con ahínco tanto espacios verdes de ocio y esparcimiento como nuevas formas de vida, ligadas básicamente a la naturaleza y el medio ambiente, en definitiva, a espacios netamente rurales.

-Potenciar la actividad económica en el municipio tanto atrayendo iniciativas de otros lugares como potenciando los recursos endógenos, en un intento de dinamizar el municipio manteniendo siempre su "carácter" y rasgos netamente rurales, pero que, paralelamente, posibiliten el giro necesario para cambiar de signo la dinámica actual.

ANEXO I:

Relación de calles y portales incluidos en las dos áreas objeto de rehabilitación (zonas de Casco y Elizmendi);

.CALLE PLATERíA-ZILAR KALEA (Código1110): Portales; 1,2' 4 y 6

.CALLE MAYOR KALE NAGUSIA (Código 1120): Portales: 1, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 10, 12, 13, 14 (Bar Garmendia), 15, 16, 17, 18, 19, 20, 21, 22, 24, 25, 28, 30, 31, 33, 34, 36, 38, 40, 42 y 44 (Agin Zazpi Baserria), sin (Udaletxea-Ayuntamiento).

.CALLE NUEVA KALE BERRIA (Código 1130): Portales: 1, 3 (Solar sin edificar), 5, 6, 9, 11, 13, 14 (Ibarrazpi Baserria) y 16 (Ibarrazpi Baserria).

.CALLE HERREROS-ERREMENTARI KALEA (Código 1140); Portales: 1

.CALLE IGLESIA-ELIZ KALEA (Código 1150); Portales: 1, 6 (Zubiaurre Baserria) y 8 (Sagastume Baserria).

.CALLE DE LA FUENTE-ITURRI KALEA (Código 1160): Portales; 1

.ERREKA BAILARA (Código 1180): Números: 74A (Kabela Berri). 79 (Ibargain).

.CALLE ELIZMENDI-ELJZMENDI KALEA (Código 1192). Números: 27 (Apalasagasti), 31 (Arbelaitz), 32 (Aristi). 35 (Etxeberritxu), 36 (Elicegui), 38 (Elorrieta), 39 (Escribanoenea), 40 (Erretotxe),41 (Goiko Ostatu), 42 (Goiko Ostatu), 46 (Idogarate). 47 (Lizarraga I), 48 (Lizarraga Berri), 49 (Miguel Enea), 50 (Motsea), 52 (Muñu Berri), 62 (Zumargain), 64 (Celayeta), 66 (Lizarra II), 67 (Muñu Aundi), 69 (Sarobe-Etxeberri), 195 (Edificio Anejo a la Ermita de Santa Cruz), 196 (Ermita de Santa Cruz), 197 (Iturri Ondo ó Goiko Ostatu Berri), s/n (Eliza).