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Bañistas en la Playa de la Concha
Hay que reconocer que, para ser verano (se supone que de 1916), estas señoritas van muy, pero que muy tapaditas. Suponemos que no es un día de viento sur, porque de ser así no podrían ni estar de pie sobre la arena... pero si es que no se quitan ni el calzado, con lo que molesta la arena dentro de los zapatos... Al fondo... los hotelitos con vistas al mar... ya no queda ninguno en su formato original.
Verdaderamente complicado sería bañarse en la playa despojándose de tal cantidad de telas como las que llevan las señoras del primer plano. Diremos también que los caballeros están en la arena con chaqueta, corbata y sombrero. Al fondo, además de un caballero con su canotier, se puede ver una nodriza, de riguroso uniforme, con su bebé... Obviamente han cambiado mucho las cosas en las playas. La propia Ley de costas imposibilitaría actualmente la existencia de cabinas y de toldos. En San Sebastián se han conservado gracias a la tozudez de los munícipes, pero la Ley dice que no puede ocuparse más de la mitad de la arena que emerge durante las pleamares vivas. Los que conocen la playa de la Concha saben muy bien que, en pleamar viva, apenas si quedan unos metros de arena (y eso en algunas partes), por lo que prácticamente no tendría que poder instalarse ningún toldo. Igualmente empieza a parecer poco satisfactorio que se privatice de alguna manera el espacio de la playa (arena) mediante el pago de una cantidad al Ayuntamiento, de forma que si el arrendatario de un toldo llega a su lugar alquilado, desplaza tranquilamente a quien pudiera estar allí (porque ha madrugado) tomando el sol.
Resulta curioso también el empleo de albornoces por parte de aquellas bañistas que osaban ponerse en traje de baño; aunque el caballero que "pasa por ahí" luce un modelo de traje de baño bastante curioso. Las cabinas con ruedas que hacen de fondo a la fotografía acabarán siendo sustituidas por cabinas individuales fijas en el voladizo de la Concha. En los años setenta serían sustituidas por cabinas colectivas, que poco a poco irán cayendo en desuso.
Aquí sí podemos contemplar, por fin, el traje de baño de estas intrépidas bañistas, observadas a cierta distancia por un descarado caballero.
Cantantes de Zarzuela en la Playa (1917) Las dos bañistas de la fotografía, posando sobre los estratos que se hunden en al playa de la Concha, son dos tiples de Zarzuela: Lledó y Pinillos. Esta última puede tratarse de la conocida vedette de los años veinte y treinta del siglo pasado, Laura Pinillos, que de confirmarse la hipótesis, tendría en la fotografía 17 años (?).
Bañistas en la playa de la concha En este caso con los caballeros los que posan con un deportivo atuendo en la orilla de la Playa de La Concha. En realidad deben llevar atuendos deportivos, pues la fotografía está obtenida con motivo de una prueba de natación.
George Eastman House Collection / En dominio público La playa hacia 1908 Interesante fotografía en la que se ve perfectamente la estructura de las casetas de las playas: una plataforma de planta rectangular con cuatro ruedas de madera y sobre ella una caseta con dos puertas de acceso en los lados menores, cada una de ellas comunicada con una cabida que dísponía de ventanas. Estaban generalmente pintadas de rayas que identificaban a sus propietarios. Las casetas podían trasladadas (incluso subirse al paseo en caso de temporal) con el concurso de una pareja de bueyes (como ocurre en la fotografía). Al fondo pueden verse las villas Esperanza (derribada) y Adelaida (hoy llamada Almudena) y en la playa la caseta real, de madera, antecesora de la actual, que podía deslizarse hacia la orilla del mar mediante unos railes. |
