Tras la finalización de la Guerra civil en 1939, fue
iniciada la fortificación de los Pirineos. La parte occidental de los mismos
(Gipuzkoa y Navarra) contó con un plan diseñado por el Teniente Coronel de
Ingenieros José Vallespín.
En torno al Alto de Gaintxurizkera, paso de la carretera
de Francia y de los ferrocarriles, se constituyó la denominada Organización
defensiva n. 1, que fue completada en gran parte (1939-1940), contando con
decenas de búnkeres y 1.500 m. de galerías subterráneas,
constituyendo uno de los ejemplos más interesantes de fortificación de estas
características, conservado, además en buen estado.
Esta fortificación se integró posteriormente en la denominada
"Línea P", mediante la que, a partir de 1944, se intentó nuevamente fortificar la
cadena pirenaica
Con motivo de la reforma de la Carrretera N-I a su
paso por el puerto de Gaintxurizketa fueron destruidas parte de tales
fortificaciones.
La planificación adecuada de la obra podría haber favorecido
la conservación de una parte de la fortificación destruida, sin sacrificar el trazado de la nueva
carretera ni aumentar el coste de la misma.
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