Geografia de Guipuzcoa

Geografía de Guipúzcoa

Serapio Mugica Zufiria (1854-1941)


 

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Geografia de

Guipúzcoa (1918)

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Epilogo
Adicion
 
 
 

/1087/

[EPILOGO]

 

Hemos llegado al final de la obra, después de una labor de mucho tiempo, que ha constituido para nosotros una pesadilla continua en los años que ha durado su publicación, por haber tenido que atender á ella á la par que á las obligaciones que nos impone el cargo de inspector de Archivos Municipales /1088/ de Guipúzcoa, que venimos ejerciendo. Hemos procurado, en la composición de este libro, aportar á él todos los datos necesarios para que el lector pudiera formar una idea cabal, á la vez que de la pobreza pasada de Guipúzcoa, de la marcha progresiva, que los habitantes de ella han venido siguiendo, hasta reunir los valiosos elementos que constituyen en la actualidad el mecanismo de la Provincia en todos los órdenes de su vida. Por eso nos hemos referido á aquel suelo ingrato, cubierto de matorrales y esquilmado por las guerras, que apenas si tenía sustancia para alimentar á unos cuantos ferrones que, encerrados en parajes abruptos en donde no faltasen los dos elementos necesarios á sus rudas faenas, sufrían los rigores de la vida, espaciando el estrecho campo en que se habían instalado, á fuerza de arrancar el mineral á la montaña y desbrozar con el hacha la abundante vegetación que les cercaba por todas partes como barrera infranqueable; á algunos pastores que tenían que vigilar con ojo avizor á su ganado, en terrenos poco aptos para el caso, á fin de que las alimañas no les diezmaran los rebaños; á varios agricultores que labraban la tierra en los lugares más fáciles, con ganado deficiente y mal alimentado; todos los cuales juntos, en unión de los pescadores que habitaban en la costa y se sustentaban del mar, y tal cual obrero ocupado en los astilleros, apenas si llegaban á formar una población de 65.000 habitantes al finalizar el siglo XVI, y todavía de este número tenían que emigrar muchos á buscar el conducho para amatar fa gana de comer, como nos dicen con frase gráfica los escritores de tiempos pasados. Hemos patentizado los medios puestos en juego para sacar á la agricultura de tan decadente postración, hasta llegar al estado floreciente en que hoy se encuentra, roturadas muchas tierras que antes permanecían incultas, renovados aquellos antiguos caserones, mitad lagares y mitad cuadras insanas, con nuevos edificios dotados de viviendas más higiénicas y de establos acomodados, alumbrados por luz eléctrica, en donde se alojan magníficos ejemplares de ganado vacuno, que llaman la atención por su mucha corpulencia y producción abundante de leche.

En el ramo de Beneficencia y Sanidad, hemos recordado aquellos tiempos en que los locos eran trasladados al manicomio de Zaragoza con mil penalidades propias de tan largo trayecto y á los desgraciados expósitos que en edad tan tierna eran conducidos á Calahorra, cuando no se les abandonaba en en campo, y se han puesto de manifiesto las medidas adoptadas para llegar al estado próspero eh que se hallan colocados hoy tan importantes ramos en la Provincia, con un manicomio modelo en Santa Águeda y con la casa-cuna de Fraisoro, montada con todos los adelantos apetecibles, en donde tienen lujoso albergue los niños y quienes los amamantan, aparte del cuidado especial que se tiene con los primeros al repartirlos por los pueblos y entregarlos á las nodrizas que se encargan de su crianza. Hay que añadir á estos servicios de carácter provincial, los muchos establecimientos de beneficencia locales, instalados en varios pueblos con grandes comodidades, entre los cuales va á /1089/ descollar el grandioso edificio que en la actualidad se levanta en Tolosa en terreno que antes ocupó la granja agrícola, y que parece ideado de intento para una casa de esta índole.

Otro ramo importante es el de Instrucción pública, que ha ido desarrollándose á medida que se han abierto nuevos caminos y desbrozado el campo, lo cual permite que acuda á los establecimientos de enseñanza casi todo el elemento escolar de la parte rural de Guipúzcoa.

Esta juventud recibe el pan intelectual en edificios acomodados, y de ello es prueba el pueblo de Ormaiztegui, que siendo uno de los más diminutos del país, cuenta con: establecimientos dignos de una capital de provincia.

De aquellos malos pasos en los que el viajero se veía obligado á detenerse por la crecida de cualesquiera de los riachuelos que atravesaban los caminos, hemos llegado á la situación presente en que vemos el país cruzado de ferrocarriles terrestres y aéreos, tranvías, carreteras, puentes y caminos vecinales, y cubierto el suelo de postes telegráficos y telefónicos, que llevan el servicio hasta las aldeas más modestas, y de otros que transmiten la energía y la luz eléctrica hasta las fábricas más distantes y las casas más humildes y apartadas.

Y al hacer mención del estado próspero á que han llegado en Guipúzcoa estos y otros ramos, que tan alto han puesto el nombre de esta Provincia, la más diminuta de España por su territorio, no podemos menos de elevar nuestra voz y dedicar un elogio á las Juntas y Diputaciones que han regido los intereses provinciales, porque á ellas toca principalmente el desarrollo adquirido aquí por todo lo que representa riqueza y adelanto.

Si se trata de los intereses agrícolas, desde los tiempos más lejanos vemos á esas Corporaciones importando trigo de otras comarcas españolas y extranjeras para alimentar á sus habitantes, que con sus escasas cosechas no tenían que comer ni que sembrar, y trayendo maíz, como en 1854, para repartirlo entre los pueblos, previo anticipo de 90.000 pesetas á este fin. Permite traer en 1774, sin pagar derechos de Aduana, dos mil ovejas churras y corderas de Castilla, y en tiempos más recientes, trae, por su cuenta, guano del Perú, y más tarde abonos químicos puros para evitar falsificaciones. Fomenta el arbolado con medidas eficaces, abre la granja de Tolosa en 1856 y la de Fraisoro en 1895, trae ganado de Suiza, establece exposiciones en la Provincia, acude á otras que se celebran en la Corte de España, pone paradas de toros en los pueblos, subvenciona los concursos locales de ganadería y costea concursos agrícolas acompañados de Fiestas Euskaras, concede premios para la higienización de los caseríos, fomenta la formación de sindicatos y sociedades de seguros, crea la Caja de reaseguros y sufraga los gastos de impresión de obras y revistas que tienden á difundir las nociones más convenientes á los labradores; en prueba de cuanto venimos afirmando, baste recordar que para las atenciones de este ramo de agricultura figura la partida de 141.256 pesetas en el presupuesto de 1917.

/1090/ Para el fomento de la industria, vemos á esas corporaciones regalar á los Reyes y á otros personajes armas y otros objetos fabricados, en Eibar, á fin de que conozcan el estado de adelanto que aquí alcanzan ciertos oficios.

A fines del siglo XVIII, vemos á nuestra Diputación hacer un esfuerzo colosal para abrir la carretera que había de unir á Salinas con Irún; al mediar el siglo XIX fomenta una suscripción, que produjo varios millones, para la apertura del ferrocarril del Norte, y después subvenciona con un tanto por ciento los que se construyen dentro de la Provincia. Abre y cuida con sin igual esmero las carreteras y caminos vecinales, y subvenciona, desde 1850, con una módica cantidad á los pocos pueblos que no tienen carretera. La prima que destina á este ramo en el presupuesto vigente es de 994.000 pesetas.

En el ramo de Beneficencia y Sanidad, además de atender, como hemos visto, solícitamente á los expósitos y á las refugiadas en la sala de maternidad, así como á los desgraciados que acuden al manicomio de Santa Águeda, ayuda con mano generosa á las familias de los náufragos, socorre á los transeúntes pobres y á los necesitados de los pueblos, y cubre los gastos de vacunación, y adquiere máquinas desinfectantes y potabilizadoras, con un presupuesto de 677.555 pesetas.

Atiende á la Instrucción pública con los gastos obligatorios y cubre los gastos de la Escuela Normal Superior, ayuda á las especiales y gasta en la propaganda de la cultura intelectual y física 17.350 pesetas, invirtiendo en todo lo que se refiere á gastos de enseñanza, la cantidad de 371.83 5 pesetas, de las que 16.100 corresponden á la propaganda de la cultura intelectual y física, que entre otras partidas contiene las subvenciones que concede á la Sociedad de Oceanografía, Museo naval guipuzcoano, Museo municipal de San Sebastián, Escuela de armería de Eibar, etc, Hemos visto anteriormente como en 1850 envió dos pensionados á la escuela de, Grignon para el estudio de la agricultura. y en la actualidad pensiona á jóvenes artistas y concede becas á estudiantes y en este concepto consigna 4.500 pesetas. En las Fiestas Euskaras hay certámenes de música y literatura, y concede premios á este fin desde este año, fija en sus presupuestos una cantidad para trabajos de prehistoria vasca, y merced á ese auxilio, personas doctas exploran dólmenes y cromlecs y revisan cuevas y cavernas. Coadyuva á la investigación de los trabajos históricos y atiende á la revisión y ordenación de los archivos municipales.

Cuida de la conservación y mejora de las iglesias pobres, para las cuales señala anualmente la cantidad de 10.000 pesetas.

Desde tiempos muy lejanos, cuida de la construcción y conservación de los puertos de mar de la Provincia; á la Diputación se debe la instalación del teléfono que une á unos pueblos con otros, poniendo en comunicación rápida y directa á sus habitantes; obra suya es el observatorio meteorológico de Igueldo, en cuyas predicciones tanta fe depositan los hombres de mar; á ella /1091/ se debe la instalación de la Caja de ahorros provincial, que tantos beneficios ha derramado sobre la Provincia; los hijos ilustres de Guipúzcoa han encontrado en la Diputación la más fervorosa panegirista, y ella ha levantado estatuas y ha puesto lápidas en honor de los mismos.

Esta inmensa labor de la Diputación de Guipúzcoa, que tanto dice en alabanza suya, bien merece, como tributo debido á la justicia, que quede sintetizada y recopilada á manera de apéndice al final de este volumen, aparte de las referencias que por extenso quedan expresadas en sus capítulos correspondientes en el cuerpo de la obra. Así se verá con cuanta razón empleaban nuestros mayores el cariñoso dictado de Madre Provincia para expresar lo que las Juntas y Diputaciones eran y significaban para ellos. Así se verá también que la Diputación rige en verdad los intereses de Guipúzcoa y los administra con envidiable celo, en el más amplio y comprensivo sentido de la palabra. Teniéndolo en cuenta se comprende el hondo prestigio, la autoridad moral y la veneración respetuosa de que en este país disfruta la Diputación, porque ella viene á ser, á modo de representación fidelísima de Guipúzcoa, la encarnación de sus aspiraciones, la vocera de sus anhelos.

 


 

© Texto: Herederos de Serapio Múgica. ©  Edición electrónica: Juan Antonio Saez, 2006-2007

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