Lurralde :inv. espac. N. 8 (1985) p. 219-232 ISSN 1697-3070

VITORIA-GASTEIZ 1950-1980:

POLITICA URBANA, ESPACIO INDUSTRIAL E INDUSTRIALIZACION .

 

Pedro Mª ARRIOLA AGUIRRE

Departamento de Geografía

Universidad del País Vasco.

 

INTRODUCCION

A partir de la década de 1950, en la ciudad de Vitoria-Gasteiz, se inició un proceso de industrialización que produciría un conjunto de transformaciones demográficas, económicas, funcionales, sociales, espaciales y morfológicas; Una pequeña ciudad con funciones administrativas y de servicios, se convirtió, en menos de 10 años en un centro industrial próspero.

La mutación urbana producida por la industrialización puede ser esbozada, sucintamente, por medio de los datos estadísticos de un apartado previo que consideramos necesario.. Sin embargo, si el fenómeno de la industrialización no sólo es descrito a través de las estadísticas poblacionales, económicas, espaciales, etc..., sino también valorando los factores que lo propician y lo desarrollan, la política urbana se hace presente en todo momento, como factor decisivo e hilo conductor de proceso, en el marco de una economía capitalista con la cada vez más acentuada intervención Estatal.

Entendiendo la ciudad como "máquina" (1), como capital fijo y medio de desarrollo del proceso de producción y acumulación capitalista, el objetivo de la política urbana, en el mundo del capital, es el desarrollo de esta ciudad como condición general del proceso de producción.

En la ciudad del capital, la producción de suelo urbano se lleva a cabo a través de diferentes agentes y con diferentes intereses (2), según sea la finalidad de aquella. En el caso de la producción de suelo urbano como medio, ésta es básica para la producción y acumulación general. Sin embargo, de esta inversión y transformación del suelo como "soporte", no se deriva una acumulación directa para los agentes urbanos privados, quedando, por tanto, en manos de la iniciativa oficial. A este respecto, la planificación y, sobre todo, la práctica, como dimensiones de la política urbana (3), del Estado y de sus instituciones, son fundamentales para la consecución de la finalidad última: el desarrollo de los procesos de acumulación y la reproducción del sistema.

Por todo lo anteriormente expuesto, se hace necesario el análisis del grado, la intencionalidad y la forma en que la política urbana aborda de entre los diferentes campos de desarrollo de la ciudad-máquina, la producción del espacio urbano como medio; es esto lo que se pretende, en el caso de Vitoria-Gasteiz y en los 30 últimos años.

1.CRECIMIENTO INDUSTRIAL Y EXPANSION URBANA.

Si el crecimiento urbano se presenta como resultado de las causas estructurales (4). Un fuerte crecimiento económico y el paralelo incremento demográfico, en el caso vitoriano es previa la descripción de estos dos fenómenos aunque en lo que respecta al primero, nos centraremos en el sector industrial.

En 1950, Vitoria-Gasteiz se presentaba como un centro urbano, capital de provincia, con una población de hecho de 52.206 habitantes (5). En 1980, la población era de 192.775 h. ; en 30 años la población se había cuadruplicado. Incluso, en algunos momentos, en la década de los años 60, fue la ciudad de mayor crecimiento poblacional relativo de todo el Estado, con un porcentaje superior aI40%.

Todo este crecimiento se debió principalmente a la inmigración: en 1950 la población nacida en Vitoria representaba la mitad (50,87% ) del total de habitantes de la ciudad. En 1975, el 58,18% de 1¡¡ población no había nacido en el Municipio. A ellos habría que añadir aquellos que, nacidos dentro del Término Municipal (6), no la habían hecho en la ciudad y, posteriormente, se trasladaron a ella.

En 1982, este fenómeno se ha reducidp: el 42,24% es el porcentaje de los no nacidos en Vitoria; mientras que las nuevas generaciones ya son nacidas en Vitoria.

Los datos demográficos que también nos ponen de relieve la importancia de la industrialización que atrajo gentes de otros lugares:

Si durante la década de los años 50 la población activa del sector secundario representaba a un 44,32%, algo mayor que la dedicada al terciario (43,32%); en 1975 la población del sector industrial era más de la mitad de la total activa, el 59,51 %, mientras que la del sector terciario se reducía al 38,94%. En 1982, se reconoce una tendencia hacia el equilibrio debido a una serie de causas entre las que se pueden enumerar, el fin del crecimiento industrial, la crisis económica y la terciarización que comporta el desarrollo. La población industrial representa en estos momentos el 57,11% del total de activos mientras que al sector servicios pertenece el 41,63%.

Los datos poblacionales son el resultado de un proceso de transformación urbana cuyo motor, la industrialización, puede ser puesto de relieve, al observar el crecimiento del número de instalaciones industriales. (Cuadro 1).

CUADRO 1. Instalaciones Industriales por quinquenios en Vltorla. 1950-1980.

QUINQUENIO N.o DE INDUSTRIAS Indice base 100 en 1950
1950-1954 102  
1055-1959 145 142
1960-1964 383 377
1965-1969 491 481
1970-1974 597 585
1975-1979 534 523

Fuente: Cámara de Comercio e Industria de Alava. Memorias anuales y "Economía Alavesa". Varios años (7).

Desde 1950 y hasta 1980, el número de instalaciones industriales por quinquenios ha crecido en Vitoria de manera acelerada y sólo en el último quinquenio estudiado se inicia una pequeña regresión.

Aunque iniciado unos años antes, el proceso de despegue industrial se confirmaría a partir del Plan de Estabilización de 1959, continuando durante 15 años.

En la década de 1950 se inicia la industrialización; los antecendentes y los factores, óptimos en ese momento, serían aprovechados por la política oficial local.

2.ANTECEDENTES Y FACTORES DE LA INDUSTRIALIZACION .

Durante la década de los años 50, a las industrias existentes y originarias de Vitoria, se fueron sumando otras nuevas, entre las que predominaban las foráneas.

En el caso de las primeras, algunas tenían una larga tradición en la ciudad. Así, desde el siglo XIX existían en la ciudad empresas como Ajuria y Aranzabal dedicadas a la fabricación de maquinaria agrícola (8), Heraclio Fournier (Artes Gráficas) y Sierras Alavesas (metalúrgica). En los primeros años del presente siglo se habían sumado otras: Fundiciones Prado, Echauri, S.A. , Armentia y Cia. ; casi todas del sector metalúrgico. Junto a ellas, las fábricas de muebles y explosivos (Hijos de Orbea, Explosivos Alaveses, Pirotecnia Lecea), alguna de tipo Químico (Fábrica Española de Purpurinas) y las dedicadas al abastecimiento alimenticio local (fábricas de chocolates, panificadoras etc.. .), constituyeron durante la primera mitad del siglo XX, un discreto sector industrial de la ciudad.

Mediado el siglo, algunas de estas empresas vieron la conveniencia de ampliarse y, situadas dentro del casco urbano, necesitaban espacios nuevos en la periferia.

El otro grupo de industrias, las nuevas: Areitio, S.A., Forjas Alavesas, S.A" S.A.O.R.S.A., M.O.V.E.S.A., M.E.V.O.S.A., Iriondo, S.A., la mayoría de capitales foráneos, se fueron instalando en sectores periféricos, siendo, en muchos casos, pioneras en espacios propiamente industriales.

De esta manera, según Zárate Martín, a mediados de la década de los SO, la industria en Gasteiz aparecía localizdaa de modo anárquico en el casco urbano y en las afueras de la ciudad (9):

  • Al Este, junto a la Estación del F.C. Vasco-Navarro, se encontraban: la fábrica de Explosivos Hijos de Orbea, Explosivos Alaveses, Pirotecnia Lecea, Cerrajería Yoldi y Maderas Retana.
  • Al Sureste, Heraclio Fournier, Esmaltaciones S. Ignacio, Beiztegui Hnos. y Sarralde.
  • En el Sur, Iriondo S .A.
  • En el Suroeste, Textil Alavesa y Cremalleras Areitio.
  • Al Oeste, Aranzabal, Ajuria, Terciopelera Vasca y Textil Vitoria junto al casco urbano, más alejada Mevosa.
  • En el Nordeste, Movesa.
  • Al Norte, Talleres Celta, Industrias Ali y Forjas Alavesas, ésta algo más alejada.

Todas estas industrias se habían instalado sin intervención y promoción de una política oficial dirigida expresamente a la industrialización. Sin embargo, ya en la segunda mitad de los años So, las instituciones locales y provinciales valoraron el nacimiento espontáneo del que se llamó Polo Industrial Natural, que se desarrollaba en base a una combinación de factores, por lo que se decidió incentivar y planificar la industrialización.

Al tratar de los factores de la Industrialización de Vitoria, seguimos a Ortega Valcárcel quien afirma que "'No se trata tanto de hallar motivaciones o factores universales para explicar la instalación industrial, como de proporcionar una interpretación de la industria -del espacio industrial- en relación con cada momento histórico y en relación con el sistema económico y los objetivos políticos de la sociedad a que pertenece ese espacio industrial" (10).

Atendiendo a ello hemos de enmarcar la industrialización de Vitoria dentro del despegue de un proceso que, a nivel estatal, se vislumbra a partir de la mitad del siglo XX.

Efectivamente, es durante la década de los 50 cuando, en base a una serie de factores, tanto de la coyuntura y política estatal como local, se desencadena el proceso industrializador de Gasteiz .

Tras la etapa de autarquía, el capital español que comienza a movilizarse, no sin haber conseguido el respaldo de la Administración, inicia un proceso de acumulación a escala Estatal, para, en una segunda etapa, tras el Plan de Estabilización de 1959, unirse al capital extranjero con el apoyo oficial. Este proceso puesto de relieve por los estudiosos de la economía española (11), es lo que también se ha llamado la' 'industrialización a ultranza' , que se inicia en la segunda mitad de los años 50 para alcanzar su desarrollo pleno en la década siguiente.

Sin embargo, la plasmación espacial de este proceso no es uniforme toda vez que se nos presenta con variaciones locales y regionales, dentro de una única finalidad de desarrollo económico en el marco del capitalismo con intervención estatal.

En el caso de Gasteiz, además de esta coyuntura estatal, se ha de tener en cuenta el factor regional.

En efecto, Vitoria y Alava en general, en la década de los 50, se presentaban como un traspaís de Vicaya y Guipúzcoa, territorios pioneros en una primera industrialización del siglo XIX. La saturación industrial, en parte debida a problemas espaciales, de núcleos industrializados de las provincias coste ras comenzaba a producir un desbordamiento de industrias hacia Alava y sobre todo hacia Vitoria (12).

Estos factores de primera importancia se combinaban con otros de tipo más general, mientras que por otro lado también existían factores más concretos y particulares:

Por un lado Vitoria constituía un marco urbano que ya de por sí, dentro del sistema capitalista, es una condición general de los procesos de producción y acumulación (13). Por otro lado existen factores locales de tipo natural como es la situación de este marco urbano en el centro de la Llanada Alavesa, lugar de fácil accesibilidad y punto medio entre el Cantábrico y la Meseta, con espacios llanos y propicios para la expansión industrial.

Esta serie de factores, los derivados de la coyuntura y la política Estatal, los del marco regional etc..., a los que habría que añadir el factor cultural puesto de relieve por Ollora, serían valorados por las instituciones locales (14). Todos ellos constituirían la base de una política urbana dentro de la que destaca una política de suelo, de producción de suelo industrial, -inversión en el espacio como medio de producción como inicio de un proceso de acumulación general.

La producción de suelo industrial, llevada a cabo de forma singular y con efectividad, se plasmó a partir de 1956 con la creación de la Zonas y Polígonos industriales; ello supondría la expresión definitiva de la política urbana (15).

3.POLITICA Y PRODUCCIÓN DE SUELO INDUSTRIAL.

3.1. Las primeras zonas industriales: una producción de suelo industrial al margen del planeamiento.

Con la moción del alcalde D. Gonzalo Lacalle Leloup al Pleno municipal de 11 de Enero de 1956, se expresa el deseo de facilitar el desarrollo de la Zona Industrial de Olárizu pero sobre todo se pretende iniciar un proceso de creación de Zonas Industriales al Norte de la ciudad (16). A partir de este momento y con el siguiente alcalde, D. Luis Ibarra Landete, la gestión municipal fue continua y no cesaría en ningún momento con el fin de industrializar la ciudad.

Con la aprobación de esta moción se acuerda: elegir el emplazamiento, acordar la expropiación de terrenos, convertir en propios los posibles bienes comunales, obtener créditos del Banco de Crédito Local y estudiar un plan de obras; todo ello sería gestionado por una Comisión denominada de Industrialización y Ensanche.

En Septiembre del mismo año se aprobaba la delimitación de una zona, al Norte de la ciudad, en la que se advertían una serie de factores positivos:

En primer lugar la zona era próxima a Vitoria, al tiempo que presentaba un relativo alejamiento del centro urbano. Por otro lado, existían buenas posibilidades para el transporte y las comunicaciones: el sector estaba atravesado por las carreteras de Bilbao y Vergara; precisamente de estos centros industriales era de donde habían comenzado a llegar industrias. Además existía una línea de ferrocarril de Vía Estrecha Vitoria-Mecolalde y se pensaba en la posibilidad de establecer una nueva estación de Renfe en el lugar .

Los ríos Zadorra y su afluente Sto. Tomás podrían ser aprovechados: el primero serviría para la captación de aguas y el segundo para la evacuación de residuos.

Por último, en el espacio delimitado existía una importante extensión de terrenos comunales que, una vez desafectados, se podrían enajenar como propios.

De esta manera, si la política municipal se había empeñado en conseguir terrenos de forma rápida, con mínimos costos, en adquisición e infraestructura, el lugar era propicio. Los terrenos serían baratos por cuanto que se situaban relativamente alejados del Casco Urbano de Vitoria, del que estaban separados por otros que, en principio, se había pensado en destinarlos a usos industriales y que ahora se revalorizaban; los propietarios, en muchos casos, poseían tierras en ambas zonas con lo que la compensación venía ya dada. Por su lado, los terrenos comunales, algunos pantanosos y sin registrar, eran tierras, en su mayoría baldías, pertenecientes a las Juntas Administrativas de Entidades Locales Menores del Ayuntamiento de Gasteiz. Estos terrenos suponían un dinero en mano inesperado por las Juntas, compuestas, en su mayoría por propietarios agrícolas.

Todos eran factores positivos, mientras que los negativos -la situación de la Zona a barlovento de los vientos dominantes y los riesgos de inundaciones no fueron tenidos en cuenta.

Si la localización se consideraba óptima para la finalidad de la política urbana de industrialización, la gestión y la financiación fueron también eficaces:

En la Sesión del 19 de Septiembre de 1956 se aprobó el sistema de adquisición directa de terrenos por gestión amistosa y bajo la amenaza de expropiación. Para ello, en Diciembre del mismo año, se acordaría la creación de la Fundación para el Patrimonio Municipal del Suelo. La adquisición de terrenos se realizaría mediante préstamos de la Caja de Ahorros Municipal de Vitoria.

Sin embargo, la gestión debía ser más ágil y la financiación más real y efectiva por lo que se llegó a un acuerdo, aprobado en Enero de 1957 y formalizado en Abril del mismo año, con la Caja de Ahorros Municipal, por el que la Entidad de Ahorro sería la encargada de comprar y vender los terrenos en nombre del Ayuntamiento, mientras que éste reservaba sus presupuestos para urbanizar; los beneficios de la transformación del espacio, no superiores al 15%, serían repartidos. De esta manera se obviaban trámites difíciles de llevar a efecto con las disposiciones legales vigentes y agilizaba la contratación. Es pues, ésta, una de las claves del éxito en la transformación del espacio.

Con el sistema descrito, se pudieron ofrecer unos precios de suelo ligeramente superiores a lo estipulado por la Ley del Suelo, lo suficientemente elevados como para obtener la conformidad de los propietarios y, al mismo tiempo, se evitaba la apropiación de plusvalías por parte de éstos o de cualquier intermediario. Así, en 1957, los precios pagados a particulares oscilaban entre 14 y 17 ptas. m2 y los comunales costaron entre 6 y 10 ptas. m2. En el mismo año, en barrios periféricos residenciales los precios oscilaban entre las 70 y las 200 ptas. m2 y en el Centro de Vitoria entre las 500 y las 1.000 ptas.

Por otro lado se ofrecían a los industriales parcelas a 20 y 25 ptas. entre 10 y 15 veces más baratos que en Vizcaya o en la Cuenca del Deva (17).

Si bien es cierto que los terrenos podían ser iguales en precio que en otras provincias limítrofes, en éstas, aquellos no contaban con infraestructuras y en ellas no existían los beneficios fiscales que otra corporación, la provincial, facilitó en colaboración con este empeño, además de intervenir directamente en algunas obras de infraestructura que financió (Carreteras y canalización del río Sto. Tomás).

Estos acuerdos se realizaron en Enero de 1957 al igual que la aprobación de un Plan de Urbanización denominado Plan Especial, acoplado al Plan General de 1956 que, elaborado en 1954, no había previsto nada a este respecto. El Plan Especial recogería las disposiciones de la también reciente Ley del Suelo.

En Abril de 1957, un poco más de un año después de la aprobación de la primera moción ya se habían reparcelado 901.173 m2 a 37 empresas. En Junio del mismo año eran 59 empresas en 921.144 m2 que emplearían a 3.903 obreros. Se habían pagado 861.350 m2 a sus antiguos propietarios y ya había 13 proyectos para iniciar las obras de nuevas industrias.

En 1956, la Zona Industrial presentaba los siguientes resultados:

 

Superficie Parcelada 1.029.468 m2

Calles y Parques 517.449m2

Industrias 61

Puestos de Trabajo 4.425

Inversiones totales 45.408.185

La rápida ocupación de la Primera Zona Industrial, denominada Gamarra-Betoño, llevó a su ampliación constituyendo una segunda Zona, la de Gamarra-Arriaga. Este sector, aún no estando tampoco incluido en la Planificación General Urbana, siguió los trámites de un Plan Parcial. Aprobado el 26 de Febrero de 1958 por el Ayuntamiento -dos años después de la primera moción lo fue por el Ministerio de la Vivienda el 18 de Mayo de 1959.

En esta Zona o Polígono Industrial el sistema de actuación también sería el de Expropiación, con la intención de llevar a cabo una gestión amistosa. Siguiendo el mismo sistema de la Zona anterior, la colaboración financiera de la Caja Municipal de Ahorros fue de vital importancia para la adquisición de 192 fincas cuya ocupación se retardó hasta 1962, debido a la incertidumbre creada por el Plan de Estabilización de 1959. En 1965 la superficie total de la Zona era de 1.751.465 m2. La superficie útil era de 1.200.000 m. Las plazas, calles y zonas verdes ocupaban 550.848 m2. Las empresas instaladas' eran 15, con 4.300 puestos de trabajo. Las inversiones habían sido de 88.049.704 ptas.

La planificación de la industria había comenzado desde la base de proyectos parciales acoplados al Plan General y siguiendo las disposiciones de la Ley del Suelo. Sin embargo, la política urbana necesitaba una planificación Global para toda la ciudad. Esta era necesaria y como Rivas, Ganchegui y cols. afirman, el Plan General de 1963 fue redactado, entre sus principales motivos, para hacer frente a la necesidad de terrenos industriales.

3.2. La Planificación General y los Polígonos Industriales.

La producción de espacios industriales se había puesto en marcha y se había desarrollado mediante un sistema singular, con más gestión que planeamiento. A partir de la década de 1960, el proceso se llevaría a cabo a través del planeamiento urbanístico, global y parcial, y con el predominio de la gestión municipal.

El Plan General de 1963 constituyó una revisión del de 1956. Si la incidencia de este Plan anterior había sido pequeña en los espacios residenciales de la ciudad, mucho menor, casi nula, había sido la que tuvo a la hora de crear espacios industriales. Así, el nuevo Plan recogía lo realizado a modo de acoplamiento al Plan de 1956 y delimitaba las zonas industriales, que habrían de desarrollarse mediante el sistema de polígonos.

El Primero de ellos, el Polígono de Larragana, Plan Parcial nº 12, siguió el mismo sistema de gestión amistosa-expropiación, sobre una superficie de 1.029.285 m2, de los cuales una parte ya estaba ocupada por industrias de la primera zona industrial. Fue aprobado inicialmente el 6 de Mayo de 1964 y definitivamente el 22 de Diciembre del mismo año. En este polígono se daban las mismas circunstancias que en las zonas anteriores: existían 150.000 m2 de terreno comunal y los precios pagados a los propietarios privados oscilaron entre 20 y 40 ptas.

Antes de aprobarse ya había peticiones de unos 140.000 m2 de terrenos y en 1965, con las industrias instaladas anteriormente, ofrecía los siguientes resultados:

Superficie Parcelada 842.857

m2 Calles y Plazas 164.149 m2

Empresas 115

Puestos de Trabajo 3.445

Inversiones 54.418.131 Ptas.

Las industrias tanto de fuera de la ciudad como del interior del Casco urbano que debían ampliarse necesitaban las grandes y medianas parcelas del Polígono de Larragana; pero ya en la mitad de la década de los 60, siguiendo con un proceso de segregación funcional de la ciudad. se dejaba sentir la necesidad de espacio industrial para una pequeña industria que debía trasladarse del centro a la periferia. Por ello, la cada vez más perfeccionada gestión de la política urbana daría como resultado el Polígono de la Pequeña Industria de Betoño.

Este se situaba en un espacio más cercano a la ciudad, era pequeño, tan sólo 181.314 m2 pero ya declarado como industrial y ocupado con ciertas industrias. Tuvo una tramitación lenta a causa de 7 reclamaciones presentadas pero rechazadas todas ellas. El 6 de Abril de 1965 ya estaba aprobado, pero dadas sus características especiales, el sistema seguido fue el de Cesión de Viales con contribuciones especiales. Sin embargo, la actuación predominante seguiría siendo la de expropiación-gestión amistosa, como la que contemporáneamente se realizaba en otro sector, el de Ali-Gobeo.

Este nuevo polígono había sido delimitado en el Nordeste de la ciudad en 1962. La zona donde se ubicaba podía considerarse como de cierta tradición industrial debido a la existencia de dos grandes factorías: la primera es la Azucarera Alavesa, instalada en el lugar desde principios de siglo. La segunda, Mercedes Benz España, se había instalado en 1953, siendo una de las pioneras del despegue industrial vitoriano.

El polígono de Ali-Gobeo, tramitado a través del Plan Parcial nº 26, fue rechazado en un principio por el Ministerio de la Vivienda y hasta 1967 no fue aprobado. Hoy abarca 1.398.890 m2 y es el resultado de un proyecto más elaborado.

La ciudad, mediada la década de los 60, había conseguido un desarrollo industrial; sus polígonos industriales del Norte estaban parcelados y adjudicados, sólo el Ali-Gobeo se había retardado. El fenómeno se había convertido en multiplicador y la gestión habría de ser continua y eficaz pero ya no urgente. Otros espacios que habían sido tocados por la industrialización, serían preparados mediante la creación de Polígonos ya previstos en el Plan General: Uritiasolo y Ansoleta, completando la Zona Industrial de Olárizu, y la Gran Reserva de Suelo Industrial de Jundiz.

El Polígono 31, Uritiasolo, ocupa un espacio destinado a industrial desde el Plan General de 1956. Con éste se había creado la pequeña Zona Industrial de Olárizu, sector que a pesar de presentar factores positivos para la instalación de industrias, no tuvo tanto interés por parte del Ayuntamiento, centrado en las del Norte de la ciudad.

Fueron los propietarios quienes, una vez confirmado el uso industrial de sus terrenos, instaron al Ayuntamiento para la realización de una Plan Parcial sobre 224.508 m2. Este fue aprobado en Febrero de 1971 y su sistema de actuación fue, lógicamente, el de cesión de viales con contribuciones especiales.

También Ansoleta (P.P. n.o 49) completaría la Zona Industrial de Olárizu, pero este polígono, previsto sobre 253.882 m2, casi todos ocupados por industrias, no pasar de ser una ordenación de alineaciones con tan sólo una aprobación inicial, en 1972, sin más tramitación.

Quince años después del inicio de la industrialización, el signo de esta cambiaba, la política municipal habría de adaptarse y sólo quedaba llevar a cabo el Plan Parcial de Reserva Industrial de Jundiz, donde se acondicionaría un espacio con grandes infraestructuras. Este Plan Parcial se tramitó sin urgencia, coincidiendo con el final de la expansión. Alejado y calificado como industrial, no podía producir intenciones especulativas, por ello, la gestión amistosa fue el cauce para que pasasen 5.280.000 m2 a manos del Ayuntamiento, tras la aprobación de 1974.

En 18 años, según Precedo Ledo, el espacio industrial había pasado de 1.402.196 m2 a 7.063.231 m2, de un 28,08% a un 46,08% del total del espacio urbano de Vitoria, produciéndose un desequilibrio ya que el espacio de uso industrial es el mayor en la ciudad (18). A este respecto podemos añadir que si tenemos en cuenta los espacios viales, abiertos y zonas verdes incluidas dentro de los polígonos industriales, los datos pueden ser sensiblemente aumentados (Cuadro 2).

Cuadro 2: Zonas y polígonos industriales de Vitoria. 1980

Gamarra 1.546.900m.2 1.029.464m.2 Municipio
Arriaga 1.751.400m.2 1.200.600m.2 Municipio
Ali-Gobeo - 1.351.000m.2 Municipio
Peq.Ind.Betoño - 181.318 Municipio
Larragana - 1.029.285 Municipio
Olárizu - 220.000 Privado
Ansoleta - 253.882 Municipio
Uritiasolo - 224.508 Privado
Jundiz 5.280.000

-

Municipio

Fuente: Ayuntamiento. Negociado de Urbanismo

El espacio, considerado como factor clave para el desarrollo industrial, ha sido objeto de una política urbana clara y decidida; la transformación urbana de Vitoria ha sido el resultado.

CONCLUSION: POLITICA URBANA, ESPACIO INDUSTRIAL E INDUSTRIALIZACION

Las conclusiones de toda esta exposición pueden resumirse finalmente, si bien han ido apareciendo de una manera más o menos explícita en los anteriores apartados .

Presentados, en un primer punto, algunos aspectos de la transformación urbana surgida en Vitoria a partir de la industrialización, los demás apartados nos muestran ésta como resultado de múltiples factores que han podido actuar en base a una decisión y una gestión municipal.

A lo largo de toda la exposición se presenta la materialización de una política urbana con una práctica singular: una producción de suelo industrial prioritaria. El espacio no tanto en su versión física sino en su versión producto, ha constituido un aspecto fundamental dentro de la estrategia oficial.

En un principio la gestión se llevaría a cabo incluso salvando obstáculos de tipo jurídico y la teoría sería superada por la práctica. Después, dentro del marco y con el apoyo de una planificación general.

El planeamiento y la práctica urbana, en el caso de Vitoria, han prestado una atención especial al espacio como soporte de los procesos de acumulación, no confirmándose, por tanto, la hipótesis de que en momentos de crecimiento, las decisiones que afectan a lo urbano son dirigidas prioritariamente a facilitar la obtención de plusvalías, realidad constatada en otros lugares (19).

Por último, sin menospreciar otros factores, se puede presentar esta política espacial, antecedente en el Estado de la de los Polos de Desarrollo y Promoción Industrial, como clave en la Industrialización de Gasteiz. El espacio ha sido planificado y ha sido producto de inversiones y transformaciones; con ello la producción y la acumulación general han sido relanzadas, como un paso más, como un éxito más, en el desarrollo del sistema.

Foto1: Aspecto de la 1.a Zona Industrial del Norte de Vitoria.Gasteiz en 1956. Foto: Archivo Municipal dl' Vitoria. [No incorporada en la versión electrónica]

Foto 2: Vista aérea de las Zonas industriales de Gamarra y el Polígono de Larraga en la década de los 60. [No incorporada en la versión electrónica]

Foto 3: Zonas Industriales : Gamarra.Arriaga (Izquierda), Gamarra.Betoño (Centro), Larragana (Superior derccha) Pequeña Industria de Betoño (Inferior izquierda). ¿Foto: Foat? . [No incorporada en la versión electrónica]

 

 

NOTAS

1.FOLIN, M. La Ciudad del Capital y otros escritos. Ed. Gustavo Gili. Barcelona, 1976. Págs. 38 y 78.

2.Sobre aspectos en torno a los agentes urbanos pueden citarse varias obras. Aquí destacamos dos; una de carácter teórico y general y la otra a nivel del Estado Español.

HARVEY, D. Urbanismo y desigualdad social. Siglo Veintiuno Editores. Madrid, 1977. Págs. 169 a 173.

CAPEL, H. CapItalismo y Morfología Urbana en España. Los libros de la Frontera. Barcelona, 1975. Págs. 85a 142.

3.LOJKINE, J. El marxismo, el Estado y la Cuestión Urbana. Siglo Veintiuno Editores. México 1979. Págs. 174.

4.Véase LABORATORIO DE URBANISMO DE Las formas del CrecimIento Urbano. E. T .S.A.B. Barcelona 1972.

5.Las fuentes de las Estadísticas Poblacionales proceden de los Censos de Población del Instituto Nacional de Estadística y del Banco de Datos del Servicio de Planificación y Desarrollo de la Diputación Foral de Alava.

6.El Término Municipal de Vitoria-Gasteiz tiene una extensión de 277 km.' y en él se encuentran, además de la ciudad. 65 núcleos rurales.

7.No hemos podido contar con la Memoria del año 1958 que consideramos de gran importancia.

8.En estas líneas seguimos a MONTES, F. "Historia Industrial de Alava" en Alava. N.o Extraordinario de Banco de Vizcaya-Revista Financiera. Bilbao 1964. Págs. 105 a 128.

9.- ZARATE, M.A. Vitoria: Transformación y Cambio de un espacio urbano. Boletín de la Institución .'Sancho el Sabio". Tomo xxv. Caja de Ahorros Municipal de Vitoria. Vitoria 1981. Pág.116.

10.ORTEGA. J. " Actividad industrial y espacio industrial como objeto de la Geografía". Ciudad e Industria. IV Coloquio de Geografía, Oviedo 1977. Pág. 24.

11.Concretamente véase; TAMAMES. R. Estructura Económica de España. Alianza Editorial. Vol. II. Págs. 1129 a 1141.

12.Sobre los aspectos relacionados con la saturación industrial de las provincias vasco-costeras véase;

FERRER, M. "La industria en la vertiente septentrional del País Vasco", en Aportación española al XXI Congreso Geográfico Internacional. Madrid 1968. Págs. 111 a 147.

MANERO, F. "Las transformaciones geográficas derivadas de un proceso de descongestión industrial; la organización del espacio en Eibar y su comarca". Ciudad e Industria. IV Coloquio de Geografía. Oviedo 1977. Págs. 397 a 412.

GARCIA MERINO. L. "Los problemas de un espacio industrial saturado; El caso de la Ría Bilbao". Ciudad e Industria. IV Coloquio de Geografía. Oviedo 1977. Págs. 378-396.

13.FOLlN, M. Op. Cit. Pág. 47.

14.OLLORA, J.M. Vitorla y su crecimiento. Pasado, presente y futuro. Cámara de Comercio e Industria de Alava. Vitoria 1976. Pág. 25.

15.La preparación de suelo industrial en Vitoria es también resaltado como fundamental por Ferrer Regales.

FERRER, M. "Espacios industrializados en España. Areas y regiones industriales.'. Ciudad e Industria. IV Coloquio de Geografía. Oviedo 1977. Pág. 349.

16.ARCHIVO MUNICIPAL DE VITORIA. Actas de la Comisión de lndustrialización. L-1.9. 1957.

Acuerdos de Sesiones Plenarias del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz.

17.COLINAS, J.A. y RIVERA, A. "Las profundas transformaciones del Siglo XX": Alava en sus manos. Caja de Ahorros Provincial de Alava. Pág. 259.

18.PRECEDO LEDO, A. "Vitoria. Medida del Cambio Funcional a través del Uso del Suelo". Medio Físico, Desarrollo Regional y Geografía. V Coloquio de Geografía. Universidad de Granada. Granada, 1979. Pág. 447.

19.Puesto de relieve por B. Secchi (1972) para el caso italiano y, en el Estado Español, por J. Gago Dávila (1977) y por Olivé, Rodriguez y Valls (1977). Todos ellos citados por Joan Vilagrasa quien lo apunta en el caso de la ciudad de Lleida.

VILAGRASA, J. Creixement urbá i agents de la producció de l'espai. El cas de la ciutat de Lleida: 1940-1980. Resurn de la Tesi Doctoral. Centre de Publicacions de la Universitat de Barcelona. Barcelona 1984. Pág. 10.